Desfile de nueves en Vila-real para abrir una caja fuerte: Suiza
Lopetegui junta a Aspas y Diego Costa ante un rival que encaja menos de un gol por encuentro. Los helvéticos sólo han perdido uno de sus últimos quince partidos.
Para España, el amistoso de esta noche ante Suiza en Vila-real se percibe como ceremonia inaugural de su Mundial: una puesta en escena que no regala puntos pero sí sensaciones. Lopetegui ha subido a la Selección en la ola de optimismo de otro tiempo. Ni una sola derrota en 18 partidos tras haberse medido a selecciones que en conjunto suman doce títulos mundiales (Bélgica, Italia dos veces, Inglaterra, Francia, Rusia, Alemania, Argentina…) y una aceptación casi general de su lista.
Lopetegui llega a la cita con más certezas que dudas. Esperará a Carvajal y mientras ensayará con Odriozola, apuesta de riesgo: sólo ha jugado dos partidos con la Selección. Pero ahí atrás tiene claro el escalafón, aunque hoy no jugará Ramos ni será titular Piqué. Arriba es otra cosa y la prueba puede servir para arrojar luz.
Desde la salida de Villa nadie ha llegado ahí para quedarse. Sólo siete de los 23 convocados por Lopetegui pasa de 30 partidos internacionales, dato que revela cierta renovación que afecta más al banquillo que a los titulares, pero ninguno de ellos es delantero centro. Se sospecha que Diego Costa parte con ventaja, pero ha metido sólo siete goles en el Atlético. Y otros tantos con la Selección en 1.267 minutos. Por contra, Iago Aspas, que debutó con 29 años y tres meses, ha marcado cuatro tantos en 289’ y mezcla mejor que ningún otro con el estilo. Pinta que hoy juntará a ambos, con el céltico vencido a la izquierda y el brasileño en punta. Ya anduvieron en esas Villa y Torres en tiempos de Luis Aragonés. Y Rodrigo, el más familiar para Lopetegui, tendrá minutos en un partido que les exigirá a todos.
Suiza, selección blindada
Porque Suiza comparece como una selección hermética. Vladimir Petkovic, bosnio-croata y suizo, porque allí acabó su carrera como futbolista y ha desarrollado gran parte de la de entrenador, tomó al equipo tras el Mundial de Brasil y lo convirtió en un pequeño acorazado. No llega al gol encajado por partido en los 38 que ha dirigido y no ha recibido ninguno en los últimos cuatro. Petkovic metió a Suiza en la pasada Eurocopa y la llevó hasta octavos, donde cayó ante Polonia en los penaltis. Sólo ha perdido uno de sus últimos quince partidos y entre septiembre de 2016 y octubre de 2017 enlazó diez victorias consecutivas, una hazaña para una selección la que el valor medio de sus futbolistas es de ocho millones frente a los 45 de los españoles. Fue segunda de su grupo en el premundial, tras Portugal.
Petkovic ha llevado el orden a una selección multicolor. Ocho de sus 26 convocados no nacieron en Suiza. Y otros ocho son de ascendencia extranjera. Sólo uno juega en la liga local. El resto se reparte entre nueve campeonatos europeos, fundamentalmente el alemán (11) y el italiano (6).
Lesionado Xhaka, Shaqiri es su figura. Un zurdo que se ha quedado en la mitad de lo que aparentaba. Nacido en Kosovo, su familia se instaló en Augst huyendo del conflicto. Con 16 años ya había debutado en el Basilea. Con 20 le fichó el Bayern. No cuajó. Tampoco en el Inter. Coetáneo de De Gea, Azpilicueta, Thiago o Javi Martínez, acaba de irse a Segunda con el Stoke. Este será su tercer Mundial, pero parece difícil que recupere aquella condición de Messi de los Alpes con el que fue presentado, presuntuosamente, en sus comienzos.
Clasificación | PTS | PG | PE | PP |
---|
Próximos partidos |
---|
Clasificación | PTS | PG | PE | PP |
---|
Próximos partidos |
---|