El Real Madrid vuelve a ofrecer una Champions a La Almudena
No lo hacía desde 2002. El obispo auxiliar de Madrid, Jesús Vidal, pidió a los jugadores que sean ejemplo para los más jóvenes.
El Madrid empezó sus visitas institucionales para celebrar la consecución de la 13ª Champions League con un acto en la Catedral de la Almudena, tras lo cual acudió a Comunidad, Ayuntamiento, Cibeles y Santiago Bernabéu. El autobús del equipo salió con un ligero adelanto respecto a lo previsto: abandonó el Bernabéu sobre las 18:05 de la tarde, estando programada la salida para las 18:15. La visita a la Virgen de la Almudena para ofrecerle el título europeo no venía haciéndose últimamente: no pasó por allí ni en 2014, ni en 2016 ni en 2017, tras la Décima, la Undécima y la Duodécima, respectivamente. La última vez que llevó allí una Champions fue tras lograr la Novena en Glasgow, en 2002.
El autobús llegó a Catedral a las 18:30 horas e inmediatamente entró en ella, donde varios aficionados esperaban para poder fotografiarse o cazar un autógrafo de los jugadores. La primera fila fue ocupada por Zidane y los cuatro capitanes: Ramos, Benzema, Marcelo y Cristiano. Florentino tomó la palabra para realizar el primero de sus discursos de la tarde: "Gracias por recibirnos para compartir la alegría de esta 13ª. Este titulo es producto de la unión, del trabajo diario y del compañerismo de esta plantilla, de unos jugadores que han vuelto a demostrar que con espíritu de equipo se puede conseguir lo imposible: tres Champions seguidas, el sueño más deseado por los madridistas. Este Madrid es una familia, los valores son pilares en la búsqueda del éxito. Zidane ha trabajado siempre desde el humildad para ser el mejor del mundo. Los aficionados sienten gran felicidad, sabemos qué representamos en todo el mundo, sentimos esa responsabilidad. De todos nuestros aficionados recibimos fuerza y cariño y por eso dejamos el alma en lograr prodigios como estos. Renovamos el compromiso de luchar por un mundo más justo, como hacemos en la Fundación. Ofrecemos esta Champions a todos los madrileños y todos los madridistas".
Tras el presidente blanco, le tocó el turno a monseñor Jesús Vidal, obispo auxiliar de Madrid (que recibió a los blancos ante la ausencia "por causa de fuerza mayor" del cardenal de Madrid, Carlos Osoro. "Gracias por este gesto, en nombre del señor cardenal, que siente no poder estar aquí, os doy la bienvenida a esta casa, la de todos los madrileños. Ha sido un gran esfuerzo, muchos chavales os miran y es importante vuestro ejemplo, que seáis testigos de que en la vida para triunfar hay que entregarse, que es fruto del esfuerzo conjunto. Sois un testimonio importante para los jóvenes y os animo a que deis buen ejemplo, a que ayudéis a que haya un mundo más solidario. La Virgen María comparte las alegrías de todos los madrileño y comparte hoy vuestra alegría", señaló Vidal.
Tras un apartado para peticiones, recitadas por Jesús Vallejo, Ramos ofreció la Champions a la Virgen y luego todo el equipo posó delante del altar de la Catedral. Concluido el acto, el Madrid puso dirección a la Comunidad de Madrid, donde les recibirá Ángel Garrido, presidente de la Comunidad que no puso estar en Kiev ante su nombramiento reciente.