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ATHLETIC

Hat-trick de Sabin Merino en el fin de curso del Athletic

Urko Vera, Bustinza e Ibai reforzaron al Santutxu en el amistoso por el Centenario del club bilbaíno, que acabó con 0-4. Fiesta en Artunduaga

Pasillo de honor a los leones en Artundaga
JUAN FLORDIARIO AS

El amistoso por el Centenario del Santutxu, uno de los clubes más queridos de Bilbao, sirvió para sacar la faceta goleadora de Sabin Merino, que este año se ha especializado en bolos (anotó al Basilea en pretemporada, Barakaldo en octubre y el ‘hat-trick’ de ayer) y bajar el telón del curso.

Hasta aquí ha llegado una campaña larga y tediosa. El colofón fue un partido clásico de postemporada, con la gente muy cargada y a ritmo somnoliento. Sabin Merino es uno de los futbolistas sin el futuro asegurado ahora que llega Berizzo, aunque con la cantada salida de Sola debe hacer valer su cotizada posición. Porque, Williams al margen, no quedan muchas garantías en el nueve con Aduriz poco a poco en la cuesta abajo y los Iñigo Vicente, Villalibre y Guruzeta aún en fase de maduración.

Le queda a Sabin un año de contrato y tendrá que abrirse paso a codazos mostrando ambición. En Artunduaga tuvo goles, un palo al final y remates de todos los colores. Más en la segunda parte, cuando desfiló Aduriz y se puso de nueve. Empezó en el costado izquierdo. El Athletic mostró más físico en el tramo final y pudo estirar el 0-4, pero no era un día para heridas. También hubo bagaje local. Como con Arkaitz Izquierdo, capitán y mediocentro, que tuvo dos balones servidos en la frontal: una detuvo sin problemas Herrerín y otra se le marchó fuera.

Fue un encuentro para los nueves. Aduriz participó mucho en la primera mitad, lo mismo que Muniain, de nuevo con chispa en la mediapunta, y Aritz completó la tabilla de marcadores. El Santutxu lanzó un par de detalles, como un eslalon de Erre y un buen regate de Bengoa. Tras el descanso entraron Vesga y Beñat por los medioscentros San José-Iturraspe y por Aduriz un Oli que formó en banda y llevó a Sabin al nueve. La tarde de Basauri sirvió para ver en el primer equipo a Areso, un lateral derecho con buena pinta, Oli y Tascón (éste del Basconia). Vivian ya lo había hecho ante el Rudes en otro amistoso. En el 61’ se vio al fin a los refuerzos del centenario club, tres jugadores forjados en el Santutxu y han llegado a la cima: Ibai (Alavés), Urko Vera (en el Cluj rumano y cedido este año al Astra Giurgiu) y Bustinza (Leganés). El punta tuvo una de cabeza, de esas que nunca perdona con sus muelles. Iñigo Martínez actuó un rato de lateral izquierdo y Lekue pasó al interior diestro.

La fiesta arrancó con el despliegue por el césped de todos los equipos de categorías inferiores del club bilbaíno, más el aurresku de honor y la entrega de la insignia de oro del Centenario a Ibai, Urko Vera y Bustinza. Se entregó una placa a Asier Aboitiz, un clásico del fútbol vizcaíno con más de 20 años en la entidad que lo deja.

 

Feo gesto con Saborit

Oleaga, De Marcos y Núñez fueron citados pero no llegaron a jugar. Saborit se pasó toda la segunda parte calentando, viendo cómo salían los convocados. Y Ziganda no lo sacó hasta el minuto 88, por el tocado Vivian, que había entrado en el 79’. Feo gesto con Enric, que tenía cara de pocos amigos. El preparador físico Urkiza trató de interceder. El Espanyol desea recuperarle, de vuelta, ya libre, como recambio de Aarón.
Despedida de Ziganda tras un año al frente
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Despedida de Ziganda tras un año al frenteJUAN FLORDIARIO AS
Mitxelo, presidente del Santutxu, con Iribar
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Mitxelo, presidente del Santutxu, con IribarJUAN FLORDIARIO AS