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BARCELONA - REAL MADRID

El pasillo de la discordia

No se hará por orden de Zidane y Valverde comparte la decisión al entender que “ha perdido la esencia”. Analizamos las razones y las reacciones de ambos bandos.

MadridActualizado a
El pasillo del Barcelona al Madrid en 2008.
Diario AS

Con el Barcelona proclamado campeón de Liga desde hace ya días, el Clásico del domingo en el Camp Nou pone frente a frente a Barça y Madrid en un encuentro sin apenas alicientes: para el Barcelona, mantener su condición de invicto en esta Liga y para el Madrid, fastidiarle ese objetivo a los culés, además de escalar en la tabla para intentar ser segundo. Lo que sí es noticia es que no habrá pasillo del Madrid al Barcelona pese a que los azulgranas ya son matemáticamente campeones, una costumbre que no se cumplirá por expresa orden de Zidane, que ya loa avisó hace semanas para evitar el debate. Analizamos las razones y cómo han reaccionado los protagonistas de ambos bandos.

Los motivos del Madrid

El pasado 7 de abril, Zidane soltó la bomba: “No vamos a hacer pasillo, la decisión es mía. No entiendo lo del pasillo”. El técnico anticipaba, casi un mes antes del Clásico y ante la perspectiva de llegar al mismo con el Barcelona ya campeón, que la imagen no tendría lugar. Al explicar los motivos, no fue muy preciso, pero sí dejó caer que el hecho de que el Barcelona no se lo hubiese hecho al Madrid en diciembre, después de que los blancos se llevasen el Mundial de Clubes, tuvo algo que ver. Y desde el club blanco también señalan que el Barça tampoco lo hizo en verano, en la ida de la Supercopa de España, que se jugó inmediatamente después de que el Madrid se llevase ante el United la Supercopa de Europa en Skopje (Macedonia).

Guillermo Amor, director de Relaciones Institucionales y Deportivas del Barça, dio una explicación en diciembre a la negativa de los culés a hacerlo en el Bernabéu (en un Clásico que luego se llevarían por 0-3): “Solemos hacer el pasillo cuando participamos en la competición, pero éste no es el caso”. Una explicación sin coherencia histórica, pues el Barcelona sí le hizo el pasillo al Sevilla en 2006, después de que los de Nervión se llevasen la Copa de la UEFA. Desde sectores del club blanco y del madridismo se interpretó la declaración de Amor como una excusa para no pasar por el aro, lo que motivó que ahora el Madrid haya decidido reaccionar de igual manera con el Barcelona campeón de Liga.

Los antecedentes

Han sido tres los pasillos entre Real Madrid y Barcelona. El primero que lo hizo fue el equipo culé al Madrid en el Camp Nou, en la Liga 1987-88; luego el Madrid lo devolvió en el Bernabéu, en la 1990-91; y el último caso fue el que le hizo el Barcelona al Madrid en la 2007-08, en el Bernabéu y el cual vivieron en primera persona Marcelo, Sergio Ramos y Messi. Fue este último un pasillo lleno de cordialidad, pues la mayoría de los jugadores blancos fueron saludando y agradeciendo uno a uno a los del Barcelona su gesto, ante el aplauso de todo el estadio blanco, que además luego presenció un triunfo contundente del Madrid de Schuster por 4-1.

El pasillo del Madrid al Barcelona en 1991.
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El pasillo del Madrid al Barcelona en 1991.

Las reacciones

En un primero momento, Sergio Ramos fue ambiguo a la hora de valorar la decisión de Zidane de no hacer el pasillo al Barcelona, pero hace escasos días despejó esas dudas: “Lo que dice Zizou va a misa. Ellos ya tienen el título que querían y el pasillo les es indiferente. Que disfruten de su título y nosotros a lo nuestro”. Lo hizo después de que Jordi Alba polemizase en torno a la decisión del técnico blanco: “Seguro que el Barça lo haría, ya lo hicimos en el Bernabéu; seguro que es algo que viene de arriba, no porque ellos no quieran…”; el lateral deslizó que se trataría de una decisión tomada desde la directiva y sin acuerdo con la plantilla, algo que Lucas Vázquez rechazó: “Nosotros estamos a muerte con el míster y haremos lo que él nos diga”.

Aunque el primero que se mostró a favor de acabar con la tradición fue, precisamente, el técnico del Barcelona, Ernesto Valverde, por entender que ya no se trata de un gesto de respeto, sino de mofa al rival. Lo hizo en diciembre, antes del Clásico del Bernabéu: “Ni lo haría, ni querría que me lo hiciesen. Hace años se hacía para reconocer a los jugadores, no había adquirido este cariz mediático que lo está contaminando todo. Nuestro reconocimiento ya lo tienen los jugadores del Madrid. Ha perdido la esencia". Aunque, curiosamente, su Villarreal sí le hizo el pasillo al Barcelona en 2009...