La Prensa: "Terriblemente eficaz"
Los medios señalaron en sus crónicas la eficacia del Madrid y los fallos del Bayern en ataque. También se pararon en que Cristiano se quedó sin marcar por primera vez en esta Champoins.
Los medios señalaron en sus crónicas la eficacia del Madrid y los fallos del Bayern en ataque. También se pararon en que Cristiano se quedó sin marcar por primera vez en esta Champions y se rindieron a Asensio, autor del 1-2 que acerca al Madrid a Kiev.
Olé (Argentina): Con Chapa de Champions. El Real Madrid no jugó bien pero se llevó un triunfazo de la casa del Bayern, que lo deja muy bien parado para la vuelta. Marcelo y Asensio marcaron para el Merengue, mientras que Kimmich había puesto en ventaja a los alemanes. Jugó mal, su figura estuvo lejos de su mejor nivel y sufrió casi todo el partido, pero lo ganó. Sí, el Real Madrid tiene chapa de bicampeón. El conjunto español arrancó abajo ante el Bayern Munich en el Allianz Arena por el golazo de Joshua Kimmich, pero la precisión merengue pudo más: Marcelo y Marco Asensio dieron vuelta el encuentro en las pocas que tuvieron para darle un buen margen para la vuelta.
Globoesporte (Brasil): Poderoso Madrid. El Real Madrid ni siquiera necesitó a Cristiano Ronaldo, su principal astro, para salir adelante en la pelea por una vacante en la final de la Liga de Campeones. El portugués perdió ocasiones que no suele errar y no anotó. Pero el Real tiene a Marcelo, que marcó en una bonita finalización desde fuera del área, y tiene Asensio, que entró para dar velocidad al equipo y lo dejó justamente en un contraataque. El Bayern de Múnich, que hizo su gol con Kimmich, sufrió con el azar: las lesiones de Robben y Boateng y el error de Rafinha costaron la derrota por 1-2 en casa.
ESPN (EE UU): El Madrid da un paso gigantesco. El Real Madrid ganó su octavo partido de los últimos diez disputados como visitante en la Champions League para poner un pie en la final de Kiev. Repitió el 1-2 de la pasada temporada y aunque por primera vez esta temporada Cristiano Ronaldo se quedó sin marcar en el torneo demostró que se transforma en su competición fetiche. El partido de Múnich fue, tal y como se esperaba, tan igualado como desigual había sido un día antes el duelo en Anfield entre un desatado Liverpool y una Roma que sobrevivió entre la suerte y la casualidad a una goleada que puede, aún, no considerarse definitiva.
L’Equipe (Francia) Terriblemente eficaz. Después de experimentar algunos sudores fríos contra la Juventus, en los cuartos de final (1-3 tras el 3-0 en el partido de ida), el Madrid sufrió nuevamente en defensa, incapaz de contener un Ribery en gran forma en su carril izquierdo. También tuvo suerte, en un control cerca del área, un error entre Robert Lewandowski y Thomas Müller frente al gol y especialmente en el fallo de Rafinha en el gol de Asensio. Pero al igual que la temporada pasada (1-2), en cuartos, como en 2014 (0-4), en los últimos cuartos, el campeón defensor ganó en Munich.
La Gazzetta dello Sport (Italia): Juega el Bayern, gana el Madrid. No, Ronaldo no ha marcado. Pero el Madrid ganó igual, obteniendo una gran ventaja en el camino a Kiev. En Múnich, Madrid venció al Bayern, su sexto triunfo consecutivo y tercero fuera en el que es el partido más repetido de la Liga de Campeones: 25 encuentros, con los españoles se imponen 12-11 en las victorias y el martes junto al Bernabéu podrá defender la ventaja. El Bayern tuvo mala suerte, tres cambios causados por lesiones (dos en la primera mitad), desperdicios en el área e inexactitud en la construcción. Solo Ribery luchó por tres. En el intervalo Zidane reemplazó a Isco (no entró en el juego) por Asensio y el muchacho, como de costumbre, ha devuelto la confianza cerrando con frialdad un contraataque de manual: error de Rafinha, doble intercambio Lucas-Asensio y finalización perfecta. Asensio en Champions ha anotado 4 goles, 3 en el Bayern.
Dayli Mail (UK): En resumen, hubo electricidad alemana. Los cinco hombres apostados delante de Javi Martínez eran todos de una disposición ofensiva y comenzaron como si este fuera su último encuentro en la tierra, asustando a Dani Carvajal en dos errores iniciales elementales. Tal vez fueron derrotados por el peso de la historia - derrotas en los últimos cinco encuentros con este viejo adversario y 13 goles encajados en el trámite - pero el juego alemán se atrofió por la pérdida de la posesión, la incoherencia y las lesiones. Apenas había pasado media hora cuando Arjen Robben y Jerome Boateng salieron cojeando. Solo agravó el problema que Thiago Alcantra, quien reemplazó al holandés, estaba desordenado y obstaculizó el flujo. El juego se volvió monocromo. Los españoles ofrecieron aún menos. El Bayern había recuperado su equilibrio al inicio de la segunda mitad cuando Rafhina cometió otro pecado capital. La defensa madridista parecía capaz de encajar de nuevo, pero el equipo de Jupp Heynckes no pudo convertir la cantidad de oportunidades que se les presentó.