Caballero: "Dentro de 10 años seguiré siendo alcalde y yendo al palco"
El alcalde de Vigo se pronuncia después de que el presidente céltico Carlos Mouriño se negara a sentarse a su lado en el partido con el Barcelona.
El día después de que se escenificara en el palco de Balaídos la tensa relación entre el Celta y el ayuntamiento de Vigo, el alcalde Abel Caballero se ha pronunciado sobre la decisión del presidente Carlos Mouriño de no sentarse a su lado durante el partido con el Barcelona: "Yo a Balaídos voy a ver al Celta, a ver fútbol, es lo que hago en el palco desde que soy alcalde. Y seguiré yendo al palco, estaré en el próximo y en todos los partidos. Dentro de 10 años seguiré siendo alcalde, ocupando el palco y apoyando al Celta".
"Al palco se va a apoyar al Celta, y los que crean que van a otra cosa se equivocan", afirmó Caballero, enfrentado con Mouriño por el proyecto del club vigués de construir una nueva Ciudad Deportiva en el municipio limítrofe de Mos.
El Celta había anunciado a través de un comunicado en las horas previas al partido ante el Barcelona, que ningún miembro de la directiva se iba a sentar al lado del alcalde "mientras éste no cumpla su palabra y deje de atacar sin motivo a la entidad".
Mouriño cumplió su advertencia en una escena llena de tensión antes de que se diera el pitido inicial. Esperó en lo alto del palco a que se sentaran todas las autoridades y posteriormente se dirigió a Caballero. Después de esa conversación dejó libre el asiento que le corresponde y en vez de sentarse a la izquierda del directivo visitante, lo hizo a la derecha. La butaca que quedó libre se encargó de ocuparla Carmela Silva, presidenta de la Diputación de Pontevedra y concejala del PSOE en Vigo. Esa reacción de la compañera de partido de Caballero propició que Mouriño se levantara para encararse con Silva. El embrollo finalizó con Silva volviendo al asiento donde estaba inicialmente.
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