El Granada baja tres puestos desde que llegó Morilla
Los tres partidos sin ganar que acumula el Granada le llevan a la octava plaza a diez puntos del ascenso directo, situación peor que cuando fue destituido José Luis Oltra.
El cambio de entrenador no está funcionando. Los números son claros y evidencian que el Granada no sólo no ha mejorado desde que Pedro Morilla relevó a José Luis Oltra en el banquillo rojiblanco, que era para lo que se producía el cambio, sino que encima han empeorado las prestaciones y los resultados del equipo.
Oltra fue destituido porque el Granada acumuló tres derrotas seguidas y se colocó a ocho puntos de la zona de ascenso directo. El equipo entonces marchaba quinto y llevaba varias semanas seguidas en puestos de eliminatorias. Ahora, tras los cuatro partidos dirigidos por Morilla, ha descendido hasta la octava plaza y tiene a dos puntos los puestos de promoción y a diez los de ascenso directo.
El Granada de Morilla ha ganado en casa al Numancia (1-0) y ha empatado con el Osasuna (1-1), pero el problema ha estado fuera. El nuevo técnico ha pinchado gravemente contra los dos equipos que están casi descendidos: durísima derrota en el feudo de un Lorca que llevaba varios meses sin ganar (3-2) y pobrísimo empate en el campo del Sevilla Atlético (0-0).
Hay algo aún peor. En las tres derrotas seguidas que le costaron el puesto a Oltra el equipo mereció más, mientras que con Morilla los malos resultados han estado acompañados de una imagen mala, lamentable en más de una ocasión, mostrando que el actual Granada está muy lejos de ser candidato a subir.
La ausencia de Machís, sancionado en los cuatro últimos partidos, y de Adrián Ramos, que jugó unos minutos ante el Sevilla Atlético tras un mes de baja por lesión, han ido en contra del nuevo técnico, que se jugará su futuro el próximo domingo contra la Cultural Leonesa en otro partido clave en el Nuevo Los Cármenes
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