Mou revienta el alirón del City
El equipo de Guardiola alarga su pena tras el 3-0 en Champions y se queda sin alirón tras ir ganando 2-0 al descanso. Pogba (2) lideró la remontada. Smailling la cerró.
El Manchester City tendrá que esperar al menos otra jornada para ganar la Premier League después de perder 2-3 ante el United en un derbi para la historia. El equipo de Pep Guardiola se fue al descanso con un contundente 2-0 a favor pero acabó sufriendo su segunda derrota en lo que va de campeonato después de que un doblete de Pogba y otro gol de Smalling lograran dar la vuelta al marcador en una segunda mitad de película.
El City solo necesitaba ganar uno de sus últimos siete partidos para completar el doblete (ya ganó previamente la Copa de La Liga) y salió al campo con la sensación de que no quería alargar ni un minuto la espera. Se olvidó de la derrota por 3-0 en Anfield y se lanzó a por a su rival pese a que De Bruyne, Walker, Gabriel Jesús y Agüero se quedaron en el banquillo para descansar de cara al partido de vuelta de los cuartos de final de la Champions League contra el Liverpool.
Mourinho, por su parte, apostó por un once con futbolistas para dominar el encuentro (Ander, Pogba o Alexis) pero en la práctica prefirió ser fiel a su estilo. Klopp enseñó a Europa que la mejor forma de ganar al City es atacándole pero el técnico del United ignoró el consejo y optó por la táctica contraria. Agazapó a su equipo atrás e intentó tapar las virtudes del líder con un fútbol rudimentario.
En ese panorama, los 20 primeros minutos resultaron insustanciales más allá de un posible penalti de Young por mano tras un centro de David Silva. El City tardó en imponer su estilo pero, una vez que Kompany logró el 1-0 a los 25 minutos en un córner, pareció no tener freno.
El líder se desmelenó con el gol a favor y a la media hora Gundogan dobló la ventaja con una definición exquisita. De Gea falló en la salida de balón y el centrocampista alemán, asistido por Sterling, sorteó a Matic con una media ruleta para luego mandar a la red el 2-0.
El City se sintió dueño y señor del partido y, ya con muchos espacios, David Silva comenzó su festival de pases al hueco. El canario dejó solo a Sterling hasta en dos ocasiones pero, en ambas, el extremo inglés perdonó el gol que hubiera dejado el partido prácticamente sentenciado antes del paso por los vestuarios.
La remontada
La afición del Etihad empezaba a descorchar el champán al descanso pese a los fallos de Sterling mientras que los analistas atizaban a Mourinho por su fútbol rácano y elogiaban a Guardiola por lo contrario. Nadie podía imaginar entonces que el City fuera a pagar tan caro los errores de Sterling en una segunda parte que se recordará durante décadas.
Gundogan tuvo otra ocasión para matar el partido nada más salir de los vestuarios pero la cruceta lo impidió para permitir la resurrección del United. Pogba acortó distancias en el 51 tras un genial pase de Ander Herrera con el pecho y el propio centrocampista francés hizo el empate dos minutos más tarde con una gran incorporación desde segunda línea.
El City tuvo vértigo y, en el minuto 68, Smalling completó la remontada al imponerse una vez más a la zaga rival para mandar a la red un centro de Alexis Sánchez.
Guardiola intentó dar otro revolcón al partido con las entradas de De Bruyne, Gabriel Jesús y Agüero pero ya fue demasiado tarde. El árbitro ignoró otro posible penalti de Young a Agüero que pudo ser el 3-3 y el acoso y derribo del City sobre la meta de De Gea en los minutos finales también resultó inútil. El meta español evitó el empate del Kun y luego el palo también se alió con el United en un disparo de Sterling para evitar la humillación de ver al gran rival del la ciudad celebrar el título en un derbi.