David Soria agradó y Sergio Rico apunta a salir del club en verano
“Era el día adecuado para darle la oportunidad a David, porque se entrena con profesionalidad, es un portero fiable”, señaló Montella.
Vincenzo Montella lo tenía claro tras el Sevilla-Bayern y su polémica decisión de cambiar de portero por primera vez desde su llegada a Nervión. “Es mi trabajo, yo tengo que tomar siempre decisiones y siempre las tomo de forma ponderada respecto a lo que estoy viendo y pensando. Era el día adecuado para darle la oportunidad a David, porque se entrena con profesionalidad, es un portero fiable, siempre lo ha sido y era un partido adecuado a este portero”, aseguraba el técnico italiano en sala de prensa.
Y el caso es que, a tenor de la reacción de la grada, acertó. El ambiente estaba viciado alrededor de Sergio Rico, en parte por la irregularidad del canterano esta temporada, en parte por estar señalado de antemano por una afición que nunca ha terminado de creer en él. La sombra de Palop es alargada y en Nervión se reclama un portero de ese nivel a pesar de que la estancia de Palop bajo los palos del Sánchez Pizjuán sea una excepción en el habitual nivel de la portería en la historia sevillista.
El mejor ejemplo es que a Soria se le aplaudió casi con la misma intensidad su paradón a Javi Martínez como sus salidas en los balones aéreos, el talón de Aquiles de Sergio Rico. Por contra, son pocas las voces que le otorgan cuota de culpa en el tanto del empate del Bayern, algo que se hubiera visto multiplicado en caso de estar Rico bajo los palos.
Montella confió en Sergio Rico desde su llegada a Nervión. Terminó con las rotaciones de Berizzo y el de Montequinto ha sido el portero titular en todos los partidos dirigidos por el italiano. De hecho, sólo Lenglet acumula más minutos desde la llegada de Montella. La confianza en Rico se vio confirmada tras su fallo en la ida de la semifinal de Copa ante el Leganés y el portero respondió con una gran actuación en Liga ante el Girona.
Desde entonces, la irregularidad volvió a sus actuaciones y el ambiente se volvió irrespirable. Si ya se barruntaba desde hace meses, su suplencia ante el Bayern indica que lo mejor para el jugador y el club es que sus caminos se separen a final de temporada. No le faltaron novias en el pasado ni le faltarán el próximo verano, aunque la fuerza negociadora del Sevilla en esta ocasión sea mucho menor tras este nuevo escenario.
