El Leganés, una de las víctimas favoritas de Rodrigo Moreno
El hispano-brasileño ha jugado en cinco ocasiones contra los pepineros: una con el Castilla y cuatro con el Valencia. El ’19’ che le ha marcado cuatro goles a los madrileños.
Rodrigo Moreno tiene cara de niño. Su tez mulata miente a quien le escudriña el rostro. Los 27 años que revela su pasaporte parecen una travesura más de su repertorio, aunque ésta, al contrario de las que acostumbra con un balón en los pies, no sirva para humillar defensas. Para asestar goles como puñaladas. La más reciente cuchillada de esa zurda sedosa tiene en el Leganés a su última víctima. No es la primera que el ‘19’ valencianista les clava a los madrileños la daga de su acierto. Con cuatro goles, los de Garitano son uno de los equipos favoritos del ariete hispano-brasileño.
Frente a los pepineros, los registros del internacional español son demoledores. A lo largo de su carrera, Rodrigo ha jugado cinco veces con el Leganés como enemigo. En tres de ellas marcó hasta acumular los antes mencionados cuatro tantos.
La primera fue en Segunda B, en la 2009-2010, cuando a Garitano aun le quedaban tres temporadas para coger las riendas blanquiazules. Con el Castilla, Rodrigo no mojó en el triunfo 0-1 del filial del Real Madrid.
Seis años después, ya en Primera y con Moreno defendiendo el escudo del murciélago, comenzó su racha frente a los pepineros. Cierto es que no logró mojar en el estreno histórico del Lega contra el Valencia, pero sí en su siguiente cara a cara con él, con Rodrigo, titular en el equipo de Prandelli. Fue en la vuelta de octavos de la Copa. Su doblete hizo vencer a los che por 2-1.
Comenzaba entonces una inercia que ha seguido esta temporada con el tanto que también anotó en el choque de la primera vuelta (3-0) y que se ha perpetuado con el que ha dado otra vez el triunfo a su equipo frente a los blanquiazules, este domingo. En Butarque, en un duelo angosto, el Valencia resolvió gracias a un zarpazo de Rodrigo. Su zurdazo desde la frontal fue el único tiro entre palos de los de Marcelino. Otra cuchillada más de Rodrigo a un Leganés al que le tiene cogida la medida, al que somete con su instinto asesino y su cara de niño.