Comienza la cuenta atrás para la despedida de Mantovani
En dos meses, cuando acabe LaLiga, habrá terminado también el vínculo del capitán del Leganés con los pepineros. Sin noticias sobre su renovación, el argentino intuye que ha llegado el final.
Hoy es 20 de marzo de 2018. En dos meses justos, el 20 de mayo, habrá terminado el campeonato de Liga en Primera División. Es el tiempo que le queda al Leganés para despedirse de Martín Mantovani y al propio capitán pepinero, para acumular de experiencias, recuerdos y cariños en el club que más ha marcado su carrera. Seguramente aquél en el que más huella ha dejado tras vestir otras camisetas, como las del Atlético B, el Atlético Baleares, la Cultural Leonesa o el Oviedo. Cinco temporadas después de haber fichado cuando era todavía un equipo de Segunda B, Mantovani dejará el Lega.
Salvo sorpresa, su contrato no será renovado. Lo ha dicho él mismo en varias entrevistas públicas. También lo ha deslizado en privado. El central no se marchará porque él quiera. Al contrario. A este argentino de sonrisa perenne y 33 años tatuados en el pasaporte (en julio serán 34) le encantaría continuar compitiendo de blanquiazul.
Pero su vínculo concluye y por ahora nadie del club ha llamado a su puerta para negociar su continuidad. Quizá eso sea lo que más le duela. El silencio. Bien sea para decirle que quieren estudiar la renovación, bien sea para anunciarle que no vestirá más la zamarra pepinera, a Mantovani le encantaría contar con una notificación que le diga oficialmente cuáles son las intenciones del Leganés.
Al sur de la capital, sin embargo, no se funciona así. Las decisiones se suelen tomar (y anunciar) al final de temporada. Entre tanto, reina el silencio. Y tras él, el capitán intuye que se esconde una dolorosa despedida. Dolorosa por el vínculo emocional que le une a este equipo.
Con 165 partidos oficiales disputados, Mantovani es uno de los diez futbolistas que más veces ha vestido la indumentaria del Leganés empatado con otro histórico como Chuso. También ha sido el primer jugador que sabe lo que es marcar con el Lega en Primera, Segunda y Segunda B, un hito que sólo ha igualado Eraso ahora que el navarro ha regresado al sur de Madrid tras dos años en el Athletic.
Conocido por sus mediáticas arengas a sus compañeros antes de los partidos (la del encuentro del ascenso en Anduva es mítica), para el recuerdo quedará su pelo teñido de azul con el que festejó la llegada a la élite o el honor de haber creado uno de los cánticos que más se escucha en la Avenida de los Once Leones. El ‘Vamos, vamos, vamos pepineros’ gestado para un anuncio cuando el Leganés jugaba aún en Segunda B retumba en cada partido en honor a un futbolista legendario que, salvo sorpresa, justo hoy, dentro de dos meses, dirá adiós a Butarque.
