1x1 del Sevilla: En la Champions, desenfreno; en Liga, ibuprofeno
El equipo de Montella maquilló el resultado en los últimos instantes, pero mostró una cara opuesta a la vista en la victoria en Old Trafford.
El Sevilla vuelve a la senda de la irregularidad con un partido nefasto en Leganés, en el que no estuvo ni física ni mentalmente. Montella refrescó mínimamente el once y no se sabe si debió hacerlo más, por el cansancio de los titulares, o aún menos, por la aportación de los suplentes. El resacón de la Champions acaba con depresión y ya lo dice el refrán: "noches de desenfreno, mañanitas de ibuprofeno". Como en Butarque. Así jugaron la alegre muchachada de Vincenzo Montella.
Sergio Rico: La portería mide 2,44 metros de altura. Según los datos del Sevilla, Sergio Rico mide 1,95. Así, como si de un teorema matemático se tratara, que alguien intente explicar cómo a un portero de 1,95, situado bajo su larguero como de costumbre y que incluso salta, se le puede hacer una vaselina. Pues así le marcaron el 1-0 al Sevilla.
Layún: Se le notó más frescura en las piernas que al resto de sus compañeros, y la mejor muestra es como llegó al final del partido para hacer el 2-1.
Kjaer: Peleó con Amrabat y estuvo bien aproximadamente una hora. Cuando vio que sus compañeros no estaban por la labor, se desconectó.
Lenglet: Salvo bajo palos un gol a los 7 minutos. No tuvo culpa en ninguno de los goles.
Escudero: Impreciso y con cara de cansancio desde el inicio del partido. Se acabó marchando lesionado, lo cual indica que quizás no debió ni jugar.
Nzonzi: Otro al que la gasolina le faltó, como se pudo ver en el segundo gol del Leganés. Al menos, pidió la pelota.
Banega: Se perderá la ida ante el Bayern de Munich y en Butarque pareció ensayarse como juega el equipo sin él. Estaba en el campo, pero como si no.
Sarabia: Ofuscado y desesperado con la inestimable ayuda del fortachón de Arberola Rojas, capaz de desesperar a Sarabia y al santo Job.
Franco Vázquez: Dos detalles para continuar cogiéndole asco al partido como el resto de sus compañeros.
Nolito: No se le puede poner un pero a su actitud, pero es que todo lo que hace da la sensación de hacerlo tan mal y tan lejos del nivel que supuestamente lo trajo de vuelta a LaLiga...
Ben Yedder: Montella lo puso como ejemplo de que calidad de los minutos que se juegan es más importante que la cantidad. Tras 20 minutos de mucha calidad en Old Trafford el francés puede apuntarse otros 90 dignos de ser tirados a la basura.
Cambios
Sandro: Salió y se puso de delantero. Montella le pegó dos gritos para recordarle que lo había sacado para la banda izquierda.
Muriel: Un paseito al sol.
Arana: Entró por la lesión de Escudero con cara de estar recién levantado.
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