Messi y su top-10 de noches mágicas en la Champions
El del Chelsea viene a unirse a la colección de partidos únicos del argentino en Europa: Arsenal, Bayern, Madrid y Manchester United, entre sus víctimas.
Messi volvió a ser demasiado Messi ante el Chelsea. Un jugador con un impacto desmesurado en los partidos, capaz de romperlos y de fabricar, cada día, un nuevo invento. Este miércoles fue el pase a Dembélé, que no vio ninguno de los 97.000 espectadores del Camp Nou, sólo él, hasta que la pelota llegó al francés. “Tiene espejos laterales”, ha escrito Martin Samuel en el Daily Mail. Messi llegó ante el Chelsea a su gol 100 en Champions: 60 en fase de grupos, 24 en octavos (el que más en la historia), 10 en cuartos, 4 en semifinales y 2 en finales.
Alguno de esos cien goles, firmados en noches inolvidables para el argentino. Aunque es difícil establecer una escalera de noches mágicas de Messi en la Champions, la de este miércoles ante el Chelsea se habría colocado en el top-10. Cronológicamente, y después de su consagración en el mapa europeo del fútbol en el año 2006 con aquel partido ante el Chelsea en el que provocó la expulsión de Del Horno y las iras de Mourinho, su primeras noches inolvidables fueron en la temporada 2008-09. Al Bayern lo fulminó en la ida de los cuartos (4-0 con doblete y asistencia) y marcó un golazo de cabeza en la final de Roma.
En la temporada 2009-10 le hizo un póker espectacular al Arsenal. Al año siguiente, volvió a voltear la eliminatoria contra los gunners (con la recordada picadita a Almunia) y también decidió la semifinal ante el Madrid (0-2 con gol para el recuerdo en el Bernabéu). Luego conquistó Wembley al marcar el 2-1 que rompió la final ante el United. En la 11-12, firmó un repóker ante el Leverskusen en octavos (7-1).
En la 2012-13, incluso débil físicamente, lideró la remontada ante el Milán (doblete en el 4-0) y, en plan Cid, salió cojo a resolver ante el PSG (asistencia a Pedro en el 1-1). Estas dos últimas, eso sí, quedarían por debajo del Top-10 y tuvieron más valor simbólico que otra cosa. Su última gran noche en la Champions había sido el 3-0 mágico al Bayern en la ida de las semifinales de la Champions de 2015. Contra el Chelsea volvió a volar y a poner boca abajo el Camp Nou.