El City gana por inercia
El Manchester City será campeón de la Premier League si gana cuatro de los últimos nueve partidos del campeonato después de vencer 1-0 a un Chelsea que ve cada día más lejos la clasificación para la Champions League.
Bernardo Silva tiró la muralla de Antonio Conte nada más comenzar la segunda mitad y el líder logró mantener sin problemas esa ventaja hasta el final para ponerse a 18 puntos del Liverpool y a 19 de un Manchester United que mañana visitará al Crystal Palace.
El encuentro entre el actual campeón de la Premier y el aspirante a robarle el trono prometía sobre el papel pero Conte lo convirtió en un partido aburrido y de una sola dirección.
El Chelsea asumió su inferioridad desde el primer minuto y utilizó la misma táctica ultradefensiva que ante el Barça para intentar rascar al menos un empate en el fortín del líder. Renunció al balón, se amuralló en torno a una defensa de 10 jugadores y confió en que Hazard, Pedro o Willian dieran un golpe al partido al contragolpe.
La táctica esta vez no tuvo el efecto deseado. Conte logró frustrar al City durante una primera mitad anodina pero un error defensivo a los 35 segundos acabó por tirar abajo todo su plan. David Silva regaló al otro Silva el 1-0 y el City ya sólo tuvo que manosear el balón hasta el minuto 90 para dar otro paso hacia el campeonato.
El Chelsea no alteró su plan ni con el marcador en contra y, pese a acabar con Giroud y Morata en el campo, terminó el partido sin un sólo tiro a puerta a favor y con una posesión del 29%. Así, el actual campeón se queda a cinco puntos de la cuarta plaza y ve peligrar mucho su clasificación para la Champions tras haber perdido cuatro de sus últimos cinco partidos en la Premier League.