El penúltimo Sergio visita en gracia el estadio del primero
La evolución del delantero perico: aquel Sergio, de solo 21 años, marcó siete goles pero no dio asistencias en la 2004-05. Luego, fue ganando más recursos.
Sergio García será titular este mediodía en el Ciutat de València si Quique Sánchez Flores no cambia de parecer en el último momento. El delantero perico, autor de dos goles y cuatro asistencias entre LaLiga y la Copa, regresa a sus 34 años (35 en junio) al estadio que le vio nacer, en su primera campaña completa y con continuidad en Primera. Han transcurrido ya 13 años de la versión beta de Sergio, un delantero más veloz y vertical, menos asistente: aquel curso metió siete goles y no dio asistencias.
La progresión en el juego de Sergio fue aumentando a medida que su juego maduraba. De la misma manera que el de Bon Pastor dejó atrás las lesiones, gracias a su mejora nutricional y al trabajo de gimnasio, también fue desempeñando otro rol en los equipos en los que jugó. En la campaña 2007-08 se produjo el primer punto de inflexión, en un Zaragoza que descendió esa campaña. Pero aquel conjunto, que llegó a tener hasta cuatro técnicos, contaba con una delantera de nivel, formada por Oliveira y Diego Milito, con Sergio como improvisado extremo: metió cuatro goles y dio 13 asistencias, lo que le valió para ir a la Eurocopa. El delantero irreverente no solo era hábil en el área, sino letal para asistir a sus compañeros y encontrar espacios.
Del Sergio del Levante, goleador y buscavidas, al último del Zaragoza, ya se produjo la primera evolución. En el Betis jugó los dos papeles (nueve goles y siete asistencias el primer año, por solamente 12 goles el último) y fue en el Espanyol donde logró congeniar su rol de goleador y asistente. Ahora, más lejos del área, menos veloz pero igual de intuitivo, ha pasado a ser el mejor socio de Gerard.