Gerard y Sergio García, la sociedad ‘matagigantes’
Entre los dos jugadores del Espanyol se reparten goles y asistencias con las que tumbaron a Atlético y Real Madrid y la que sirvió para empatar ante el Barcelona.
Ha conseguido el Espanyol hacerse con la ‘triple corona’ 37 años después de la última vez, en la temporada 1980-81. Un hito que se debe al buen hacer del equipo de Quique Sánchez Flores ante los tres grandes históricos de LaLiga. Y, en especial, a la labor de dos futbolistas que han participado en todos los goles que sirvieron para tumbar a Atlético de Madrid y Real Madrid, y para empatar con el Barcelona en encuentro liguero.
Gerard Moreno y Sergio García conforman la sociedad ‘matagigantes’ del Espanyol, con permiso de Óscar Melendo y su extasiante gol en la Copa. El del Bon Pastor anotó el pasado 11 de diciembre el tanto del triunfo frente al Atlético, en el minuto 87 y a asistencia de Esteban Granero, estrenando así también su casillero en Liga desde que en verano regresaba al club perico; en la Copa del Rey sí había anotado con anterioridad, concretamente contra el Tenerife. No ha vuelto por ahora a marcar más goles Sergio, pero sí se ha dispuesto a darlos.
La primera asistencia que brindó esta temporada, ante Las Palmas, ya tuvo como destinatario a un Gerard Moreno que con aquel gol ponía el provisional 0-2 en el marcador (acabarían 2-2 y gracias, ya que Pau López detuvo un penalti en los instantes finales). Luego ayudaría Sergio a que Sergi Darder anotara su primer gol en LaLiga con el Espanyol, en La Rosaleda, ante el Málaga (0-1). Un gran calentamiento para culminar la conexión ‘matagigantes’.
Se da la circunstancia de que los goles ante Barcelona y Real Madrid han llegado en jugadas prácticamente idénticas, en una asistencia milimétrica de Sergio García desde la derecha que Gerard empalmaba, de primeras, para batir al portero, ya fuera Marc-André Ter Stegen o Keylor Navas. La diferencia entre ambos estribó en que el tanto ante el Barça llegó de cabeza, mientras que frente al Madrid empalmó Gerard con la derecha. Pero siempre buscando su espacio entre los centrales para quedarse en franca ventaja.
Sergio, además, aguantó ante los blancos los 90 minutos. O los 93’, porque fue justo en ese instante cuando sirvió el 1-0. Una señal inmejorable para quien ha participado, marcándolo o entregándolo, en cinco de las últimas 11 dianas del Espanyol en Liga. Va claramente de menos a más, igual que un Gerard Moreno que pide a gritos ser convocado por la Selección: suma 11 goles en LaLiga, más los tres que hizo en la Copa.
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