Ernesto Valverde duda si llevarse a Luis Suárez a Gran Canaria
Está advertido de sanción por tarjetas. El domingo, el Atleti. De los 20 partidos que jugó, en ocho, el delantero uruguayo abrió el marcador.
Ernesto Valverde tiene una seria duda para el partido del jueves (20:00, hora local) ante Las Palmas en el estadio Gran Canaria. Luis Suárez. Ese es el nombre que chirría en el plan del entrenador ante el serio compromiso. El uruguayo está en un excepcional momento de forma y suma en el campeonato 20 goles (hat-trick ante el Girona). Es verdad, también, que acumula cuatro amarillas y de ser amonestado podría perderse el partido de Liga del próximo domingo en el Camp Nou ante el Atlético.
Es verdad que el delantero buscó de manera descarada (y poco acertada) la amarilla que le habría liberado de viajar con sus compañeros y que le habría limpiado de las amarillas del ciclo. Valverde siempre dice que “el partido más importante es el próximo”, aunque en este caso podría pensar de diferente manera.
Futbolista imprescindible para el Barça, dada su capacidad anotadora y su feeling con el resto de compañeros de ataque, Luis Suárez ha jugado hasta el momento 22 partidos de Liga y en ocho de ellos hizo el primer gol del equipo. Su influencia en el ataque se considera vital, aunque en algún partido deberá descansar para entrar en la rotación. Valverde lo tiene todo claro y conoce la estadística al dedillo: ahora le toca decidir.
En Mestalla no vio amarilla y jugará la final
Luis Suárez ya vivió una situación similar esta temporada. Fue hace unas semanas, cuando el Barcelona viajó hasta Valencia para buscar el billete a la final de Copa del Rey. En la ida los culés vencieron 1-0 y debían sellar el pase al partido definitivo de la competición, que será el 21 de abril en el Wanda Metropolitano ante el Sevilla. El delantero uruguayo fue alineado como titular en Mestalla, un estadio que se le da bien al atacante y donde no es muy bien recibido por parte de los hinchas albinegros. Pese a jugar a provocar y aceptar ser provocado, Suárez supo mirar siempre a otro lado y su actuación pasó desapercibida en ese aspecto. De esta manera, el cuerpo técnico culé podría darle, de nuevo, un voto de confianza al atacante, que para los próximos partidos se intuye determinante. Pese a todo, Valverde sabe que la plantilla tiene jugadores que pueden, en un momento, relevar a Suárez. El sustituto natural sería Paco Alcácer, aunque la buenas sensaciones que están dando Ousmane Dembélé y Philippe Coutinho calman a los técnicos culés.
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