Asensio vale por tres
Ha abierto la lata en cinco partidos, más que nadie en el Madrid. Con cierta fama de revulsivo de lujo, sus números como titular reclaman más oportunidades.
Pocas cosas diferencian más al fútbol y al amor como los matices en torno a sus principios y sus finales. Por eso uno de los versos más leídos en las paredes de los aseos de gasolineras o tascas, "el beso más difícil no es el primero, sino el último", choca de lleno con una de las frases más famosas de Di Stéfano, que le dijo a Alfredo Relaño que, por complejidad, "el primer gol vale por tres"; el primer gol es el último beso.
Aquella acertada frase del argentino pondera el gran mérito de Asensio, que ha tomado la iniciativa hasta ser el jugador del Madrid que más veces, cinco, ha marcado el primer gol del partido esta temporada. Lo hizo en su primera titularidad del curso, en la vuelta de la Supercopa de España con el Barcelona, con un chutazo que hizo enloquecer al Bernabéu y alucinar a Zidane. Y, tras aquel tanto primerizo, cuatro más: ante el Valencia, en la segunda jornada de Liga; en Copa, en las idas frente al Fuenlabrada y al Leganés, rival liguero de este miércoles; y ante el Betis, el pasado domingo en el Villamarín.
El dato es otro ejemplo del paso al frente continuo que es la carrera de Asensio, ahora también dominante en una suerte, la de abrelatas, reservada en los últimos tiempos a Cristiano, que este curso ha estrenado el marcador tres veces, las mismas que Bale. Marco, segundo máximo goleador de la plantilla, sigue mandando mensajes a quien le quiera escuchar y, sobre todo, a quien no, que no sea por no tocar la puerta hasta echarla abajo: el 80% de sus goles y asistencias desde agosto han llegado como titular.