Ramírez pide al Supremo que declare que no hubo delito
En 2011 fue condenado por un delito contra la ordenación del territorio y se le impuso una pena de 3 años de cárcel que no tendrá que cumplir.
El empresario Miguel Angel Ramírez, presidente de la UD Las Palmas, ha presentado un recurso ante el Tribunal Supremo para que se reconozca que los hechos por los que fue condenado en sentencia firme en 2011 no constituían delito y que no cometió ilegalidad urbanística alguna.
Ramírez ya no tendrá que cumplir la condena de tres años de cárcel que se le impuso por un delito contra la ordenación del territorio por construir un camino, una pérgola, una pajarera y un muro de cerramiento en la finca de su vivienda en La Milagrosa, unas obras que en su día los jueces de lo Penal catalogaron de ilegales y contraria a las normas de protección del paraje de Pino Santo.
La Audiencia de Las Palmas ha declarado hoy formalmente que esa condena está prescrita, pero el empresario aspira a convencer al Supremo para que establezca que nunca debió ser condenado, a través de un mecanismo excepcional: la revisión de una sentencia firme.
Fuentes de su defensa han explicado a Efe que ese recurso se basa en el devenir del caso en los Juzgados de lo Contencioso Administrativo tras haberse dictado la condena penal.