Lugo y Albacete se reparten puntos y sensaciones
El entramado defensivo de Martín maniató al Lugo. Jaime Romero, dos goles en tres partido. Dani Rodríguez estrelló un balón en el palo con 1-1.
Cuando un equipo no está lúcido y el otro tiene tan claro que su plan es que no se juegue, lo más normal es que salga un partido como el que presenciaron los tres mil valientes que bajaron al Anxo Carro en medio de las gélidas temperaturas que azotaron la zona. El Lugo no encontró en ningún momento su mejor versión y el Albacete, impecablemente dirigido por Enrique Martín, se llevó lo que había trabajado durante toda la semana e incluso pudo ser algo más.
El Lugo tuvo la primera en los pies de Cristian Herrera, que no supo aprovechar un gran pase de Jaime Romero para batir a Nadal. El partido se planteaba con dos propuestas totalmente antónimas, con un Lugo dominador y ofensivo y un Albacete a la contra y buscando segundas jugadas. El ritmo del partido se iba espesando con el paso de los minutos, merced al entramado que Martín había dispuesto en el campo con un Albacete intenso y duro al que el Lugo no le cogía el aire. Así, el juego fue pasando de plano a pesado, y de pesado, a infumable. Una primera parte que por no tener, no tuvo ni apenas ocasiones.
La segunda parte no cambió el escenario. El Lugo quiso dar un paso adelante, pero siempre se encontraba con el muro albaceteño. Cristian Herrera, negado, volvió a fallar estrellando el balón en Nadal cuando se cantaba el gol en la grada. La jugada sirvió para azuzar al publico y al propio equipo, que encontraría el premio solo tres minutos después, con el gol de Romero a pase del propio Herrera tras centro de Vico. Empataría Dani Rodriguez solo cuatro minutos después en una jugada mal resuelta por la zaga local. La igualada reafirmó al Albacete en sus pétreas convicciones, sacando del campo a Susaeta para dar entrada a Gorosito. Debutó Chuli en los locales buscando el gol, pero el partido ya era una sucesión de faltas, despejes y errores. La última fue para Dani Rodríguez, que estrelló un remate al palo. No hubo más, y el reparto de puntos fue justo para los méritos y deméritos de ambos en un partido más que prescindible.