Diego Costa siempre suma
El hispanobrasileño ha jugado cinco partidos en esta etapa en el Atlético y en todos ellos o ha marcado (tres) o ha dado una asistencia (dos). Participa en un tanto cada 61 minutos sobre el campo.
Diego Costa está fino y el Atlético lo necesitaba. La inactividad de casi siete meses sin jugar no se ha notado en el rendimiento y el ariete, en los cinco partidos que ha disputado en esta nueva etapa, ha tenido participación directa en goles: o ha marcado o ha dado una asistencia. Tres tantos, dos pases de gol.
Sus compañeros le buscan sobre el césped con insistencia, a veces demasiada, y a él le gusta sentirse importante. No obstante, no está cegado con el gol hasta el punto de ser excesivamente chupón. Ante el Girona pudo intentar cabecear hacia atrás el pase de cuchara de Thomas, pero optó por la mejor opción, una dejada a Griezmann, que tenía todo a su favor para marcar. Contra el Lleida, en la vuelta de Copa, Costa entró por la izquierda con potencia, pero tuvo temple para frenar en seco, levantar la vista y darle el balón a Carrasco, que fusiló.
En su estreno con el Atleti, saliendo desde el banquillo en Lleida, no tardó ni cinco minutos en ver puerta. Juanfran centró raso y él se lanzó con todo para hacer un remate cruzado y marcar. Tres días después, en el Wanda y ante el Getafe, fue Vrsaljko quien le puso en bandeja el tanto, cuya celebración le costó la expulsión. Descansó en Eibar y ante el Sevilla, en la ida de los cuartos de Copa, volvió a marcar con un zurdazo cruzado. Tres dianas en seis remates a puerta. Y en la primera parte había marcado otro, de cabeza, mal anulado.
Diego Costa ha jugado 305', pues entre unas cosas y otras sólo ha disputado un partido completo. Es decir, que participa en un gol cada 61 minutos. Lleida (dos veces), Getafe, Sevilla y Girona han sufrido el potencial ofensivo de Diego. Ahora, unas molestias en los abductores le hacen ser duda para ir al Pizjuán. Si no puede hacerlo, será una malísima noticia para el Atlético.
