Año nuevo, vida nueva
En su primer partido de 2018 el Real Zaragoza quiere empezar a cambiar la dinámica frente a un Barcelona B que en estos momentos marca la zona de descenso.
Año nuevo, vida nueva. Así dice el dicho por el que brinda el Real Zaragoza, que hoy disputa su primer partido del año con la intención de empezar a cambiar la dinámica y dejar atrás un nefasto 2017. Enfrente, un Barcelona B que amenaza al equipo aragonés con arrastrarlo a la zona de descenso. El filial azulgrana sólo tiene tres puntos menos que los pupilos de Natxo González, que necesitan hacerse fuertes en casa de una vez por todas para que el dramatismo no se instale en La Romareda.
El Zaragoza sólo ganó en todo 2017 cuatro partidos de Liga como local, dos de ellos esta temporada. Récord en la historia del club. Por tanto, el equipo aragonés espera que hoy los Reyes Magos también pasen por La Romareda para hacer realidad uno de sus principales deseos de cara a este 2018: hacer de su estadio un fortín, empezando por el partido de esta noche frente a un Barcelona B que no gana a domicilio desde la primera jornada. El filial azulgrana, sin José Arnáiz, que se ha quedado en casa tras disputar el pasado jueves la Copa con el primer equipo, acumula desde entonces cinco empates y cuatro derrotas fuera de casa y también espera que la dinámica cambie con el nuevo año para salir de la zona de descenso.
En el Zaragoza la responsabilidad del gol recaerá en Vinícius Araújo, que aún no se ha estrenado como goleador esta temporada. Las bajas de Borja Iglesias, Toquero y Raí le dejan como único delantero disponible para Natxo, que antes de las vacaciones vio cómo el Consejo le respaldaba públicamente a través de un comunicado. Pero esto es fútbol y el Zaragoza necesita ganar para espantar cualquier fantasma.