Una década de la última gran noche de Reyes del Espanyol
El 5 de enero de 2008, el Espanyol de Ernesto Valverde daba un recital ante el Villarreal. Un 3-0 que estaba resuelto en apenas 13 minutos y que situaba a los pericos terceros.
Fue el último gran partido en Montjuïc. Y también, el de aquel equipo que la temporada anterior se había plantado en la final de la Copa UEFA. Y, a la postre, la última gran noche de Reyes del Espanyol, que cumple ya una década. El 5 de enero de 2008, daban los pericos ante el Villarreal un recital de época, un partidazo cuyos ecos aún resuenan hoy.
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Solo 13 minutos le bastaron al equipo entonces entrenado por Ernesto Valverde para resolver el partido. Anotaba el 1-0 Raúl Tamudo, quién si no, tras culminar una jugada que se iniciaba con una pared entre Iván de la Peña y Luis García. Y cinco minutos después llegaba el segundo, que conseguía Valdo Lopes con un fenomenal detalle técnico, de espuela. Fue en el 35’, cuando ponía la guinda el capitán a la salida de un córner.
Aunque desde ese momento quitó el Espanyol el pie del acelerador, Tamudo llegó a anotar un gol fantasma que hubiera supuesto su ‘hat-trick’. Y, en el momento de su sustitución, salió ovacionado. Aquel triunfo sin paliativos situaba al Espanyol tercero en LaLiga, con 36 puntos, aunque a partir de la siguiente jornada comenzaría un paulatino derrumbe hasta la décimosegunda plaza.
