María José Pérez: “Ojalá me retire en el Granadilla”

María José Pérez, de 33 años, lleva el fútbol en los genes. Su padre, el extremo Cristo, llegó a jugar en el Betis en los setenta. Pertenece a una saga de futbolistas canarios, los Pérez. “Mi padre es el alma de todos nosotros. Le llamaban El Chispa porque era muy rápido. Viene a verme jugar siempre que puede”, desvela. Creció jugando con su primo Ayoze, 9 años menor. Ambos son delanteros, ella del Granadilla Egatesa Tenerife, él del Newcastle. Su otro primo futbolista, Samuel, está en Noruega. Hace dos jornadas Ayoze dio una sorpresa a María José, al felicitarla por Twitter por el triunfo del Granadilla ante el Barcelona. “Ayoze siempre esta ahí, en los momentos en que a una le hace ilusión. Todo el mundo me dice que me parezco a mi primo y yo les respondo que no, que es él quien se parece a mí porque yo soy mayor”, bromea.

Con seis goles es la máxima goleadora del Granadilla. También puede presumir de haber de haber sido parte activa de las dos últimas derrotas en la Liga Iberdrola del poderoso Barça, la pasada temporada, con el Levante, y ésta, con el Granadilla. Ha sido una trotamundos del fútbol. Se fue de Tenerife con 17 años para jugar en el Sabadell: “Cuando me fui no sabía ni hacerme un huevo. Reconozco que he estado en demasiados equipos y que me hubiera gustado quedarme más tiempo en determinados clubes, pero al final tienes que volver a casa porque no puedes vivir de esto”.

Ahora disfruta de su regreso a casa: “Me encuentro físicamente bien y, si me respetan las lesiones, espero que me quede mucho fútbol. Soy muy feliz en este club, quiero quedarme muchos años en el Granadilla y ojalá pueda acabar mi carrera aquí”. Tras un inicio de temporada difícil, el Granadilla, sexto, ganó en la 7ª jornada 0-1 al Athletic en Lezama y en la 10ª venció 1-0 al Barça. Esta última se impuso 1-3 al Madrid CFF. “Las primeras jornadas no salían las cosas, pero sabíamos que tarde o temprano llegarían las victorias”, concluye.