Dani Carvajal ha concedido una entrevista a Diario Madridista en el que ha hablado en profundidad de la pericarditis (afección vírica al pericardio) que se le detectó y de la que informó el Real Madrid el pasado 30 de septiembre.
El lateral internacional de Leganés era apartado del equipo y obligado a guardar reposo hasta que desapareciera la dolencia. Un mes y medio después, el jugador del Madrid ya está listo para volver y apunta a que estará en el derbi ante el Atlético, en el Wanda Metropolitano.
¿Qué sensaciones tiene? Son buenas. A los cuatro o cinco días de que me la diagnosticaran no sentía dolor, no me encontraba enfermo. Para mí era complicado saber que no podía jugar, que estaba de baja y no sentía dolencia. Ahora mismo me encuentro muy bien, he trabajado bastante estas dos semanas para coger tono físico y las sensaciones son muy buenas.
Desde el club siempre han sido muy cautos con su recuperación. Sí, sí. Desde el primer momento tanto el míster como los médicos, los físios y todos me dijeron que tranquilidad, que lo primero era curarse bien, porque estos problemas pueden repercutir en un futuro. Así que hemos sido muy cautos y hemos ido cumpliendo los plazos médicos.
¿Cómo empieza todo? ¿Qué es lo que ocurre para que le hagan las pruebas y le detecten la pericarditis? El fin de semana contra el Espanyol, me encontraba algo acatarrado después del viaje a Dortmund. La noche del viernes al sábado me empieza a doler un poco el pecho y por la mañana se lo digo al doctor. En principio entreno, aunque tenía algo de fiebre, quería jugar el domingo. No le dí más importancia, pero al final del día me hicieron pruebas para descartar posibles problemas, como la pericarditis. Vino el cardiólogo, me lo diagnosticó y me dejaron bajo evolución y a la espera de más pruebas.
¿Cómo es el momento en el que le informan de lo que tiene? El cardiólogo en el informe puso que había síntomas de pericarditis. Yo todavía no era consciente de lo que era, quería jugar ese domingo e irme con la Selección, pero el club, los cardiólogos y los doctores me frenan. Al final es algo serio que no se puede jugar con ello. Llega en un momento malo, porque me pierdo partidos e internacionalidades, pero lo importante es recuperarse y estar bien.
En un primer momento, ¿se asustó? Sí, me asusto un poco. Imagínate que es más grave que lo que tengo e incluso te planteas que pueda llegar a ser algo crónico y tengas que dejar de jugar como ha habido otros casos precedentes. Pero en todo momento los doctores me dicen que no me preocupe, que es algo frecuente y que esté tranquilo, que me tome la medicación y que guarde reposo porque se acabaría curando.
¿Cómo ha sido el día a día? Las primeras tres semanas fue lo más duro, porque entre tres semanas y cuatro no me dejaban prácticamente hacer nada, no podía subir pulsaciones y se pasó muy lento. Al final, si tienes una rotura de fibras estás cinco días parado y luego empiezas a hacer cosas, ejercicios en agua, gimnasio... aquí nada de nada. Me aburría muchísimo y el cuerpo te pide actividad, sobre todo nosotros que somos deportistas. Se pasa un poco mal.
Hay que ser muy fuerte mentalmente, ¿no? Siempre tienes un poco de miedo, porque los temas de corazón dan muchísimo respeto y hay que intentar ser cautos, estar tranquilo y saber que lo importante es la salud.
¿Sigue tratándose con los cardiólogos aún? Sí, cada poco tiempo tengo revisiones y desde hace dos o tres semanas ya salía todo correcto, pero queríamos mantener los plazos de baja, aunque me hacen electros y pruebas cada poco tiempo para comprobar que todo está normal.
Cuando le dicen que puede volver, ¿qué siente? A mí me hubiera gustado volver antes, pero al final llegamos a un acuerdo para que fuera después de este parón, que serviría para coger tono y otra vez el ritmo de competición para poder encarar a tope este mes y medio antes de Navidad.
¿Ha hecho algún plan especial con Pintus estos días? Sí, hemos trabajado, aparte de con balón, mucho sin él, complementando las sesiones que he hecho con el resto del equipo con series de carrera, mucho gimnasio... Prácticamente ha sido como una minipretemporada.
Durante este tiempo no ha parado de recibir muestras de afecto de la gente. ¿Le ha sorprendido la de alguien en especial? Tengo que agradecer a todas las personas que me han escrito, que han estado conmigo, porque me he sentido muy arropado y muy apoyado. No es que me haya sorprendido nadie, pero es verdad que siempre te da muchísima alegría ver que por ejemplo gente que hace muchísimo que no sabes de ella que te escribe y te manda su fuerza, su ánimo... Al final los que más se te quedan son los de tu círculo cercano, los de mis padres diciéndome que esté tranquilo, que me voy a curar y que va a salir todo bien.
¿Qué le decían desde el club, Zidane y sus compañeros? Al ser de corazón es algo raro, entonces estábamos un poco en alerta, sin mucho miedo, pero sabiendo que es algo importante. Me transmitían todos que tuviese paciencia y que, cuando estuviese, tenía que estar bien.
Ahora que está recuperado, ¿siguen guardando esa cautela y teniendo unos plazos estipulados para su regreso o ante el Atlético ya podrá jugar? No, en principio ya tengo el alta para competir, entonces ya sin ningún tipo de problema y no creo que me ocurra nada.
Achraf ha sido el jugador que ha ocupado el lateral derecho en su ausencia . ¿Cómo le ha visto? Es un chico fantástico, darle la enhorabuena ahora que se han metido en el Mundial con Marruecos. Es muy joven, con muchas ganas de aprender, con muchísimo talento y a la vista está que ha cumplido con creces. Ha hecho unos grandes partidos y seguro que nos va a ayudar hasta final de temporada mucho.