Sergi Roberto espera una mejor oferta del Barça para renovar

Mientras que el jugador pretende que el sueldo fijo sea más bien importante, el club pretende e insiste en cargar la balanza de los variables.

Actualizado a 7 de noviembre de 2017 18:28 CET

Rodolfo MolinaDIARIO AS

Hace días que el Barcelona y Sergi Roberto mantienen contactos para renovar el contrato que el canterano tiene con el conjunto azulgrana. El actual acaba en 2019 y la cláusula de rescisión del polivalente futbolista es de 40 millones. Considerado como “imprescindible” dentro del cuadro técnico del club, el canterano espera que en próximas reuniones las condiciones mejoren y no se demore en exceso la llegada a un pacto beneficioso para las dos partes.

A día de hoy las grandes diferencias recaen en los ingresos fijos a percibir por parte del futbolista; mientras que el jugador pretende que el sueldo fijo sea más bien importante, el club pretende e insiste en cargar la balanza de los variables, algo que claro, no acaba de convencer. Sea como fuere, la voluntad de las dos partes es la de arreglar el asunto sin generar un gran culebrón.

La vida de Sergi Roberto cambió radicalmente en poco tiempo. Cuando parecía descartado (hace un par de temporadas), el jugador supo adaptarse a las circunstancias y comenzó a rendir de una manera excepcional bajo el gobierno de Luis Enrique. La pasada temporada, además, fue protagonista en dos grandes partidos que serán recordados por la afición azulgrana: la remontada ante el PSG en Champions (hizo el 6-1 definitivo) y el 2-3 en Liga del Bernabéu, cuando una brutal conducción suya acabó con el gol de Lionel Messi a pase de Jordi Alba.

Sergi Roberto, que fue tanteado los dos últimos veranos para abandonar el Camp Nou con destino a la Premier, sabe que debe estar tranquilo ante el proceso que ahora se abre. El excepcional rendimiento que está ofreciendo es su gran aval, aunque sabe que a día de hoy su sueldo quedará establecido cerca del tercer escalón salarial de la plantilla, consciente de que más adelante el club estará forzado a volver a sentarse con él y su agente, Josep María Orobitg.