El Madrid llevaba 14 goles más el año pasado a estas alturas
El equipo de Zidane sigue echando de menos la puntería que siempre le ha caracterizado. La pasada temporada, en este mismo punto, había marcado 43 tantos.
Cuesta explicar el fenómeno que acompaña desde agosto al Real Madrid: sigue asomándose al área rival muy a menudo, característica propia del equipo blanco, pero su tino es mucho menor que de costumbre. Quizá los mejores ejemplos sean los clamorosos fallos de Cristiano, el pasado sábado en Getafe, y Benzema, por partida doble ante el Tottenham. En el Coliseum no tuvo mayores consecuencias, pero lo del Bernabéu podría poner en riesgo la primera plaza del grupo.
No es por falta de ocasiones, ni mucho menos, porque las genera como churros, incluso cuando no necesita para ello emplear su mejor fútbol. Pero los resultados, que se están viendo afectados sobre todo en Liga, no engañan. Tampoco la estadística goleadora: a estas alturas, hace una temporada, los blancos habían marcado 43 goles, 14 más de los 29 que lleva hasta ahora registrados en esta.
Cristiano y Benzema, claves
La pregunta que se hace el madridismo, que no entiende por qué las musas regatean a sus delanteros, seguramente encuentre respuesta en dos nombres propios: Cristiano, pese a su condición de salvador perenne, y Benzema. El portugués, que se perdió las cuatro primeras jornadas ligueras, necesitó 28 tiros para celebrar su primer tanto en la competición doméstica. El francés, al que una lesión dejó seis partidos sin jugar, promedia una diana cada 298 minutos, unos números paupérrimos para el 9 del Madrid.
Escuchando las declaraciones de Zidane y sus hombres al desfilar ante la prensa después de empatar con el Tottenham, en el diagnóstico hay acuerdo: sobran ocasiones y faltan goles. Ahora sólo les queda dar con la receta para arreglarlo.
