Festival de goles en Vigo
Un gol de Juanpe permitió al Girona rescatar un punto en Balaídos, donde el Celta de Vigo volvió a dejar escapar dos puntos en la recta final del choque.
Todo sucedió al principio y al final. Cuatro goles en los primeros quince minutos y otros dos en el último cuarto de hora, repartidos a partes iguales, como buenos hermanos. Celta y Girona sumaron un punto, pero el sabor es bien diferente, amargo en Vigo, dulce en Montilivi. La locura se desató pronto, pues a los tres minutos los de Machín ya habían avisado dos veces, con un cabezazo de Juanpe y un disparo de Borja García. Sin embargo, fue el Celta quien golpeó primero después de una perfecta triangulación entre Maxi, Wass y Sisto. Se intercambiaron los papeles, pero funcionó igual. El delantero en conducción, el interior centrando y el extremo ejerciendo de matador.
Ni dos minutos duró la alegría en Balaídos. Porque acto seguido Portu consiguió romper la sequía goleadora rojiblanca tras 432 minutos. La persistencia tuvo premio, porque Rubén evitó el tanto primero en el mano a mano con Stuani, pero Mojica insistió con un centro que el delantero acertó a tocar lo suficiente como para alojar el balón en la red. También ayudó la indolencia de la zaga olívica. Y una vez abierta la lata, el Girona le cogió el truco, pues cuatro minutos anotó el segundo gracias a la estrategia de Machín. Aleix apuntó al segundo palo, Juanpe cabeceó al primero y allí irrumpió Stuani.
Eso sí, los rojiblancos no aprendieron del error ajeno y se dejaron empatar dos minutos después. Dejaron vía libre a Maxi Gómez y eso es pecado mortal. El uruguayo no podía faltar a su cita con el gol en Balaídos. Ya comienza a ser una rutina. Cinco goles en cuatro citas a orillas del Lagares.
Banana y empanada. Después de ese inicio tan vertiginoso, llegó la calma. Hubo varios paradones de Iraizoz de por medio, pero lo realmente jugoso sucedió al final. Primero Wass ajustició al meta rojiblanco con su ya clásico 'banana shot'. Un látigo imparable. El Celta celebraba ya el ansiado triunfo, pero la empanada defensiva sirvió para que Juanpe igualara sobre la bocina.