El Espanyol recupera la puntería antes de visitar al Real Madrid
El acierto con el gol del Espanyol se quintuplicó en una semana respecto a los tres primeros partidos de Liga. Ahora anotan uno de cada 6'3 remates.
Hasta hace solo diez días, el gran problema del Espanyol residía en su desatino. Únicamente había sumado un gol en las tres primeras jornadas, el de Leo Baptistao en el Sánchez Pizjuán (1-1), por lo que se había quedado sin marcar tanto ante el Leganés (0-1) como en el derbi del Camp Nou, ante el Barcelona (5-0). Una vez disputadas otras tres jornadas ligueras, y en la antesala de la visita al Bernabéu para medirse al Real Madrid, ese problema parece completamente resuelto.
Los números del equipo de Quique Sánchez Flores en esos tres partidos iniciales eran preocupantes. 33 remates habían acumulado para anotar un solo gol. Sin embargo, ante Celta, Villarreal y Deportivo, los pericos quintuplicaron su puntería: dispararon 38 veces (no muchas más que en el primer periodo) pero, en cambio, marcaron seis goles. Un 15’7 por ciento de acierto que supera incluso las cifras de la temporada pasada.
Si en estos tres últimos encuentros han acabado en gol uno de cada 6’3 chuts, el promedio de toda la Liga 2016-17 fue de 7’25 remates por gol. También superan la media de la primera vuelta, en que estuvieron especialmente inspirados en la eficacia, ya que entonces se precisaron 6’72 para ver puerta con éxito.
Seguramente el logro se deba a la evolución que ha experimentado el estilo de juego impuesto por Quique Sánchez Flores, puesto que al juego directo del primer curso se añade ahora la pausa, la asociación, que la semana pasada dio sus frutos con siete puntos sobre nueve posibles.
Esa puntería creció especialmente en los dos últimos partidos en Cornellà, que justamente corresponden con las dos victorias del Espanyol en esta Liga. Contra el Celta, se convirtieron en gol (anotaron Gerard Moreno y Pablo Piatti) dos de los tres remates a puerta, mientras que ante el Deportivo fueron cuatro de los cinco que fueron entre los tres palos (Leo Baptistao, Alejandro Arribas en propia meta y dos de Gerard).
El retorno de la eficacia es una noticia esperanzadora para los pericos habida cuenta de que en un escenario como el Bernabéu será crucial aprovechar las pocas ocasiones que ceda el Real Madrid si los de Quique quieren regresar con alguna recompensa. El Espanyol no gana allí desde 1996.
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