La Juve se lleva un disputado partido en los penaltis
La Vecchia Signora se llevó los dos puntos tras la tanda de penaltis después de que los 90 minutos finalizaran 1-1 con goles de Mandzukic y Dzeko.
La Juventus necesitó la tanda de penaltis para superar al nuevo Roma de Monchi y Di Francesco en el partido que cerró la International Champions Cup de Estados Unidos. A tres semanas al comienzo de la Serie A, ambos equipos dieron buenas sensaciones, pero también mostraron defectos típicos del fútbol veraniego.
Los conjuntos salieron de inicio con alguna cara nueva: los giallorossi con Kolarov y Defrel, mientras que los de Turín probaron el nivel de su nuevo lateral De Sciglio. El grupo de Di Francesco, a pesar de unas buenas oportunidades en el comienzo para Dzeko y Nainggolan, mostró no haber asimilado todavía los movimientos de su nuevo entrenador, sobre todo en las bandas y en defensa. La línea muy alta que exige el ex del Sassuolo necesita rapidez en los centrales, y en la primera mitad Jesus y Fazio, obviamente todavía lejos de su mejor condición, a menudo no la tuvieron. Antes del descanso Mandžukic, de extremo como en la temporada pasada, aprovechó una buena asistencia de Alex Sandro y sobre todo una siesta general de la zaga romanista, regateando a Alisson y firmando un 1-0 que la Vecchia Signora, más sólida y organizada en los primeros 45 minutos, mereció.
En la reanudación, sin embargo, los cambios (una decena por cada equipo), cambiaron el rumbo del enfrentamiento, favoreciendo al Roma. La Juve experimentó a Douglas Costa y también a Bernardeschi (era su estreno) en las bandas, pero fueron los giallorossi a crecer.
Un latigazo de Strootman casi partió el travesaño, y después de un paradón de Alisson ante Higuaín, Dzeko puso las tablas recibiendo un buen centro de Kolarov colándose entre Barzagli y Chiellini. El marcador no se movió hasta el minuto 90, y como prevé el reglamento de la International Champions Cup se terminó con una tanda de penaltis: el único error fue del joven Tumminiello, y Douglas Costa marcó la pena máxima decisiva, cerrando con una victoria bianconera la liguilla estadounidense de la competición. Un paso más para acercarse al fútbol de verdad: el 13 de agosto toca la Supercopa italiana, ante el Lazio.