El fútbol contra el culebrón
El Barça de Valverde juega su segundo partido en medio del lío Neymar. Más allá del brasileño, el técnico busca seguir avanzando.
Ha llegado un momento en el que al culé lo que menos le importa es el futuro de Neymar. Le obsesionó la continuidad del crack y ahora, por agotamiento, se ha levantado de su butaca y se va a la playa ya casi sin importarte cómo acabará el culebrón. “Si se va, ya vendrá otro”, dicen. Da la impresión de que el subidón vivido el pasado domingo cuando Piqué lanzó en las redes sociales, el ya más que sobado “se queda”, se ha ido consumiendo y hace bueno aquello que “cuanto más alto subes, más grande es la caída”. En medio de todo este lío, llega el fútbol como antídoto al culebrón, pues esta madrugada, en el FedEx Field de Washington (01:30 horas por Cuatro y TV3) el Barcelona de Valverde juega su segundo partido ante nada menos que el Manchester United de José Mourinho (sigue el partido en directo en AS.com).
La verdad es que en el hotel de concentración del equipo blaugrana siempre existió calma en relación al tema Neymar. Los medios transmitimos agitación extrema, pero entre técnicos y futbolistas (otra cosa son directivos y ejecutivos) siempre hubo esa sensación de tranquilidad y de confianza.
Y así llega el equipo al segundo amistoso de pretemporada, en paz. Las sensaciones del triunfo ante la Juventus (1-2) fueron muy buenas. El equipo, a falta aún de encajar bien lo que pretende Valverde, dio muestras de tener un plan con el balón en los pies. Además, mientras tuvo aire en los pulmones, pudo volver a presionar ordenadamente y eso fue el primer éxito del verano. Lograron resultados, el grupo se quedó con la sensación de saber lo que tenía que hacer en todo momento y la impresión final fue de haber acabado triunfando.
Prueba muy seria. En Washington la cosa debe ser similar. Dos años después del partido en Santa Clara (aquella vez con Van Gaal), el Barça se cruza con el United, el grupo de Mourinho que sigue recibiendo críticas por jugar a nada y acabar siempre a la contra, pero que el curso pasado sumó tres títulos y que desde el pasado 15 de mayo (ante el Tottenham) no sabe lo que es perder. El libreto del portugués no cambia nunca. Valverde, mientras, espera que pese a todo lo que se vive, Neymar vuelva a evadirse de todo y firme una actuación como la del sábado en New Jersey. Aquello fue brutal y para la empresa organizadora un reclamo brutal para publicitar su negocio.
Junto con Messi y Suárez, el tridente actuará (quizás en sabe si por última vez juntos) ante un grupo con un gran portero (De Gea) y un mediocampo físico liderado por Pogba al que le faltará la poca creación que tiene el United: Ander Herrera sufrió un duro golpe ante el Madrid y no saldrá de inicio ante los culés. En el Barça, más allá del caso Neymar, está por ver la progresión de Semedo, Samper o Roberto en mediocampo.