Valverde: "Ahora mismo no tengo compromiso con otro club"

Valverde dijo adiós a su segunda etapa en el Athletic. Visiblemente emocionado, teniendo que beber agua para superar el trago y con dos amagos de echar lágrimas, el ya expreparador rojiblanco adujo razones de cansancio para abandonar el puesto y negó que haya sellado un acuerdo con nadie (se va al Barça), aunque sí admitió que tiene un agente y éste hace su labor. “Tengo la sensación de que mi trabajo aquí está hecho, finalizado, en el fútbol siempre tiene que haber movimiento, que venga alguien con ideas nuevas, que mueva la coctelera… que los que son titulares tengan que ganarse el puesto. Un cambio les va a venir bien después de cuatro años y a mí, también”.

Antes de comparecer en la sala de prensa de San Mamés el preparador de Viandar de la Vera ha estado reunido con la plantilla, para despedirse. “No tengo ningún compromiso con ningún equipo, no he hablado con nadie. Tengo un agente y se han interesado por mí. Estoy en mi club porque es mi club y después ya miraré a otros. A lo largo de este tiempo no es la primera vez que he tenido alguna oferta de clubes importantes y siempre ha prevalecido querer vivir lo que estoy viviendo aquí y respetar el compromiso con toda esta gente”. Y la gran pregunta: ¿hay un banquillo libre, le gustaría entrenar al Barcelona”. “Cuando haya una proposición de un club hablaremos”, fue detallando, para luego soltar aquello de “cabe la posibilidad de un año sabático. Si me embarco en una aventura tiene que ser un poco difícil porque en las fáciles no me ha ido bien”.

Sus primeras palabras fueron para dejar que era “un día duro”. Inicialmente fue repasando su segundo ciclo en Bilbao, en donde abarca en total seis años. “Veo improbable que pueda hacer cinco años consecutivos en otro equipo, incluso cuatro. Soy consciente del desgaste que tiene la figura de un entrenador. Vine por dos razones fundamentales: por mi familia y porque estaba Josu (Urrutia) de presidente. Pensaba que iba a estar dos años, porque el Athletic estaba en una situación dificililla, era un reto para mí, se pedía un cambio de etapa, no era algo que me sorprendiera. Siento decepcionar a los que me pedían que me quedara. No puedo quedarme por complacer a la gente sino porque estoy convencido. Lo que lamento es no poder llevarme a toda esta gente”, apostilló, señalando al fondo de la sala, en la que se apiñaba plantilla, casi toda la directiva y trabajadores del club.

Cuando vino “sentía una obligación porque el Athletic me llamaba”. “Cuatro años después me doy cuenta que me he quedado el doble y los que me han ayudado son ellos a mí, porque todo lo que he vivido ha sido es increíble. Estoy para celebrar lo que hemos logrado, no para lamentar que me tengo que marchar”. Constató que la decisión se ha tomado en frío, porque en caliente habría firmado. “Cuando firmé el contrato veía difícil un quinto año, por la conciencia del cargo. Soy de aquí y tengo una implicación mayor”. Ahí bebió agua, sobrepasado, intentando mantener el tipo. .”Este año ha sido complicado, en la campaña no hemos estado tan afortunados en el juego, la gente está acostumbrada a estar ahí, el listón nos lo habíamos puesto muy alto y la exigencia ha sido mayor. A veces han habido voces en las que se pedía un cambio de etapa, no era algo que me sorprendiera”. La decisión está tomada desde hace tiempo. Urrutia le pidió reconsiderarlo “y hace pocas fechas le di una respuesta definitiva”, pensando hacer una comunicación de este tipo al final. “Sé que eso tiene un coste, el de la especulación que te relacionen con otros equipos”.

La plantilla asistió con un silencio respetuoso al discurso del jefe, que habló en términos elogiosos de Ziganda, su sucesor, “porque le tengo un gran aprecio personal”. “Esta gente me ha traído aquí y me ha hecho el favor más grande de mi vida. Este grupo va a permanecer en la memoria de la gente”, añadió. “Hemos intentado ser protagonistas del juego y que pudiera transmitir eso a sus aficionados, ha dado un ejemplo permanente de superación, no es casualidad tantas remontadas, que te has caído en la lona y te has levantado… No hay más que hacer un repaso a los logros, cuatro años seguidos con segundas vueltas de Liga de Campeones, eso va a permanecer en la memoria de los aficionados. Este grupo ha conseguido que entrar en Europa parezca normal. Diez de los 14 del otro día en el Calderón empezaron en 2013 conmigo. Tenemos una buena relación en general, es más mérito suyo que mío...”. Ahora quiere que gane el Barça la Copa el próximo sábado para ver al Athletic en Europa "aunque en mi casa (por aquello de raíces vitorianas) me van a matar". Entiende que es difícil una tercera etapa en Bilbao, "porque viene una generación de entrenadores que apretarán y, aunque aparento menos años, una tercera etapa la veo lejos".

Argumentó Txingurri que había pedido al presidente estar a su lado en este duro trance. Antes de despedirse tomó la palabra el propio Urrutia. "Hemos hablado bastantes veces a lo largo de la temporada, tomando una decisión final en las últimas fechas; siempre hemos puesto el interés del Athletic por encima de esa decisión", arrancó. “Tenemos que agradecerle el trabajo de estos cuatro años. Siempre hemos estado en la parte de arriba, de forma permanente y continua, es un ejemplo de ambición. Calificaría el trabajo de Ernesto de sobresaliente independientemente de si por cuarta vez consecutiva entramos en Europa o no. Su comportamiento ha sido ejemplar y es de agradecer", elogió. Deja San Mamés el entrenador con más partidos en la historia del Athletic: 306. Da pinta de ser una cifra imbatible.

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