La memoria del derbi se dibuja con 'goles de tinta'
Una muestra recorre los Espanyol-Barcelona entre viñetas y humor gráfico. Desde la pugna por Zamora al derbi de la calderilla, en 1924, o la avalancha de Les Corts, en 1952.
Lejos de los objetivos de las cámaras de 360º, la realidad virtual o las ráfagas de tropecientos disparos por segundo, en diciembre de 1900 nacía el derbi barcelonés. Unos albores paralelos a los de las publicaciones gráficas en Cataluña, hasta el punto de que tanto la fundación del Espanyol como del Barcelona se ratificaron gracias a su aparición en una de ellas: ‘Los Deportes’.
“Las cámaras de los fotógrafos no estaban preparadas para captar el dinamismo de un partido”, advierte Jordi Riera, comisario de la exposición ‘Gols de tinta’, que recorre ese siglo largo de derbis y fútbol asociados a viñetas. Desde inicios del siglo XX y durante bastantes décadas, los ojos del espectador que no podía acudir al campo eran los del dibujante. Así surgió, por ejemplo, ‘El Xut!’, publicación a la que se debe el personaje del Avi del Barça o el sobrenombre de los pericos, que obedecía originariamente no al pájaro sino a un gato popular en los años 20 con el mismo nombre, al inventarse Valentí Castanys que al campo del Espanyol apenas iban “cuatro gatos”.
Una de las primeras chispas en la rivalidad Espanyol-Barça que se plasmó fue la pugna por Ricardo Zamora, “el primero de los cracks cuando el fútbol ya emergía como espectáculo de masas”, explica Riera. Lo plasmaba, entre otros, ‘L’Esquella de la Torratxa’ en 1922.
Los partidos entre ambos rivales ciudadanos poco a poco fueron asumiendo protagonismo. Opisso, uno de los dibujantes más prolíficos de la época, escenificaba el célebre derbi de la calderilla. Empezó a disputarse el 23 de noviembre de 1924, en Les Corts, y concluyó dos meses más tarde y a puerta cerrada, el 23 de enero de 1925, ya que el árbitro Pelayo Serrano lo tuvo que suspender porque, tras expulsar a Samitier, empezaron a lanzarle un sinfín de monedas desde la grada.
Las consecuencias aún fueron más dramáticas en el derbi del 14 de diciembre de 1952, de nuevo en Les Corts. Tras adelantarse el Espanyol, se produjo una avalancha, que captó Muntañola, y que causó un fallecido y multitud de heridos, pese a lo cual se siguió jugando, sin olvidar que alguien quemó toallas en el vestuario del equipo del oxígeno, lo que hizo imposible respirar allí.
‘El Once’, ‘Vida deportiva’, ‘Pulgarcito’, ‘Tío Vivo’, ‘Barrabás’ o ‘TBO’ (que acaba de cumplir un siglo) recogieron la estela de los derbis sobre el papel. El dibujo como testimonio, sátira o incluso para fabular con resultados mejores.