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INTERNACIONAL

El nombramiento de Alcaraz provoca críticas en Argelia

El técnico granadino firmó por dos años con opción a otros dos con la selección africana. Los medios locales se han mostrado sorprendidos con el nombramiento.
Flamengo-Sao Paulo

Lucas Alcaraz.
JAVIER GANDULDIARIO AS

Periodistas, comentaristas y aficionados argelinos en general han acogido con escepticismo y fuertes críticas el inesperado fichaje del español Lucas Alcaraz, que tiene en el banquillo de la selección de Argelia su mayor reto de su carrera profesional.

Una de los más sorprendidos fue el afamado presentador argelino Lakhdar Berriche, uno de los rostros más conocidos de la sección de deportes de la cadena qatarí "Al Jazzera", actualmente en BEIN SPORT.

"Creo que no es el técnico que puede darle un extra a nuestro equipo. Nunca ha entrenado a una selección nacional, solo trabajó con pequeños clubes y tampoco conoce el fútbol africano", explicó a Efe.

En este sentido, el periodista -que siempre se inclinó tanto por Juande Ramos como por Joaquín Caparrós-, sugirió que la elección del extécnico del Granada fue fruto de la precipitación y las urgencias de un banquillo caliente con demasiados inquilinos quemados en los dos últimos años.

"Ha sido por falta de tiempo" pero también porque "es todo lo que hay en el mercado", subrayó.

Una afirmación que deja ciertos interrogantes sobre la forma y los términos en el que el nuevo presidente de la federación argelina de Fútbol (FAF), Jeídín Zetchi, ha manejado las negociaciones en España.

Zetchi, cuyo club argelino, el Paradou, dirige el español Josep María Nogués, llegó a Madrid hace dos semanas y desde el principio alimentó las especulaciones con el nombre de dos entrenadores de pedigrí del gusto tanto de los medios de comunicación locales como de los aficionados.

Según fuentes próximas a la negociación, el primero, Juande Ramos siempre fue un globo sonda, una pieza codiciada pero con el que no llegó a haber una acercamiento verdadero por cuestiones tanto económicas como de índole deportiva.

Similar ocurrió con el segundo, el extécnico del Villareal Juan Carlos Garrido, que sí reunía los requisitos requeridos por la orgullosa afición verde.

El valenciano de firmó en octubre de 2016 por el "Ettifaq" saudí y adorna su currículo con la Supercopa egipcia y la Copa de la Confederación Africana (CAF), ambas ganadas con el Al Ahly de Egipto en 2014.

Sin embargo, parece que Zetchi no logró convencerle de subirse a un banquillo que se perfila como una ruleta rusa: Argelia tiene una excelente lista de jugadores, la mayoría de ellos enrolados en ligas europeas.

Potente del centro del campo para arriba, con jugadores como Riad Mehrez (Leicester) o Yacine Brahimi (Porto), adolece de una excesiva fragilidad defensiva y de un mal ambiente, fruto de los numerosos cambios de entrenador habidos desde su fantástica presentación en el mundial de Brasil 2014.

Tras el éxito superar por vez primera en su historia la fase de grupos y caer en la prórroga frente a la futura campeona, decidió desprenderse de Vahid Halilhodzic y desde entonces ha entrado en un imparable declive de juego y resultados.

Sin un entrenador que aguantara apenas un año, comenzó a tocar fondo a finales del pasado año con un empate en casa con Camerún y una contundente derrota en Nigeria en la fase de clasificación del mundial que casi le ha dejado ya fuera de Rusia 2018.

Y la humillación que supuso para una selección liderada por el mejor jugador de Africa 2016 ser eliminada en la fase de grupos de la Copa Africana de Naciones, disputada el pasado mes de enero en Gabón.

Desfondadas las opciones Ramos-Garrido, la semana pasada salieron a la palestra otros dos técnicos españoles, después de que Zetchi deciciera romper la tradición de técnicos franceses ya apostar solo por un entrenador "Marca España".

La destitución de Aitor Karanka en el Middlesbrough le puso en el escaparate, aunque parece que los contactos con el exayudante de José Mourinho no llegaron a avanzar.

Y Joaquín Caparrós, un hombre que si ilusionó a prensa y afición pese a adolecer de las mismas taras que ahora se le achacan a Alcaraz: no habla francés, carece de experiencia en Africa y nunca ha dirigido a un combinado nacional.

Incluso se llegó a anunciar su fichaje de forma extraoficial el mismo jueves, después de que se filtrara que el de Utrera había dado su visto bueno.

Tan sorprendida como decepcionada, la prensa recibió el viernes a Alcaraz con críticas por su escaso palmarés deportivo, huérfano de títulos y equipos de relumbrón, calificándolo de una elección "de alto riesgo".

En un artículo del diario digital "Tout sur L'Algerie", el periodista Mourad Zemmori, sugería también que se trata de una decisión de última hora, ya que durante la semana pasada Zetchi ya aseguraba tener atado a su candidato a falta de detalles.

"¿Quiere esto decir que negoció con él cuando aún estaba en el Granada?", se preguntó antes de recordar la pésima trayectoria del club nazarí en la presente Liga.

"No se puede decir que el CV del nuevo entrenador impresione. Solo ha dirigido equipos pequeños en España, y uno en Grecia, el Aris de Salónica, en el que no pasó mucho tiempo. Es poco para una selección de la envergadura de Argelia. A él le corresponde demostrar lo contrario", concluía.

Críticas aparte, Berriche cree, sin embargo, que el granadino merece el honor de la duda.

"Es un entrenador andaluz, muy parecido a los argelinos y conoce sus tradiciones. Es un buen comunicador y tenemos buenos jugadores, sólo hay que dejarle un poco de tiempo", señala.