Universidad Católica se gusta en Bolivia

Universidad Católica debutó con victoria en la Copa Sudamericana frente un inoperante Petrolero de Yacuiba que, pese a la contratación de 'Fabri', no levanta cabeza. Un gran Jhon Cifuentes y un golazo de Jordy Caicedo decidieron el partido para un equipo ecuatoriano que perdonó demasiado durante los noventa minutos.

El debut de Petrolero Yacuíba en una competición internacional no fue el soñado. El equipo dirigido por 'Fabri', un histórico del fútbol español, fue dominado por Universidad Católica desde el primer minuto hasta el último. El equipo ecuatoriano tuvo la primera gran ocasión en las botas de Jhon Cifuentes, su mejor jugador, con un remate de cabeza desviado por encima de la portería de Brun. Aunque dominaba la pelota, el equipo dirigido por Jorge Célico no conseguía ganar profundidad. De hecho, el gol llegó en un saque de esquina. En una jugada ensayada, Defederico puso la pelota en la cabeza de Arboleda para que Jhon Cifuentes aprovechara para rematarla al fondo de la portería.

Aunque con un golazo de Flores los bolivianos conseguían reducir distancias, Universidad Católica volvería a ponerse por delante en la siguiente jugada. Lo haría con una gran jugada colectiva que Romario Ibarra remataría a la red completamente solo. El resultado se mantendría hasta la segunda mitad, aunque el dominio de los visitantes era total y absoluto.

Pese a que en la segunda parte parecía que Petrolero podía plantear el partido de forma distinta, siguió el dominio ecuatoriano en los segundos cuarenta y cinco minutos. Jorge Célico sorprendió a todos cuando, con el partido y el marcador controlado, quitó del terreno de juego a Elvis Patta para dar entrada a un delantero como Jordy Caicedo. Con su entrada, Caicedo revolucionó el partido. Le dio otro aire a un equipo que podía haberse dormido y, de hecho, de sus botas salió la sentencia. Partiendo desde campo propio, el internacional Sub-20 por Ecuador, en una demostración de potencia y talento se deshizo de los dos centrales que le salieron a tapar y con un derechazo ponía el 3-1 definitivo.

Con esta victoria, Universidad Católica afronta el partido de vuelta con un colchón importante. Los de Fabri, por su parte, siguen sumidos en una crisis preocupante: no ganan un partido oficial desde el 19 de febrero.