Mapi León: “El Calderón me desata la adrenalina”

Su imagen en el campo es inconfundible. Su divertido moño alborotado contrasta con su carácter serio en la defensa del Atlético de Madrid Femenino. “Lo del peinado es porque la coleta me molestaba y busqué la manera de recogerme el pelo. Un día salió esto y ahora lo hago adrede”.

Mapi León, de 21 años, es un pilar de la defensa rojiblanca y a la Virgen del Pilar, patrona de su Zaragoza natal, le debe el diminutivo de su nombre de guerra. Porque en la defensa es implacable. En el esquema de Villacampa se ha asentando como central, pero también juega de lateral: “Ser defensa te obliga a transmitir seriedad y seguridad para que las demás estén tranquilas y puedan crear”. Mapi, como el resto de las jugadoras, afronta el choque de mañana (12:00 horas) ante el Athletic, en el Calderón, como una finalísima. El objetivo es mantenerse líderes con los cuatro puntos de ventaja sobre el Barcelona: “Es una final más, pero en el Calderón. Queda mucha liga y un partido contra el Athletic, que es el vigente campeón, nos llena de ilusión”.

Cuando llegó al Atlético, en 2014, afirmó que la camiseta rojiblanca le daba mucha fuerza. Ahora se rinde ante la que le transmite la afición y más, en el Calderón: “Sentir a la afición, que es todo corazón, en este estadio, me desata la adrenalina. En un partido como éste se necesita su apoyo”.

Mapi es una jugadora experimentada en Primera División. Debutó con 15 años en el Transportes Alcaine (hoy Zaragoza CFF), con el que fue subcampeona de la Copa de la Reina en 2013, y jugó en el Espanyol antes de fichar por el Atlético.

Tras ganar el año pasado la Copa con el club rojiblanco, ahora la Liga está en su mente: “Es un sueño que está ahí, guardadito”. Confiesa que su llegada al Atlético le sirvió para confirmar que se quiere dedicar al fútbol, aunque estudia Arte, su otra pasión: “Me gusta dibujar y fuera del fútbol me relaja”. No acostumbra a dibujar de fútbol, pero en clase le encargaron hacer un retrato... y eligió a Torres.