Lovren fue refugiado con 3 años: "Me asustaban las bombas"
El central croata del Liverpool contó como fue su infancia al intentar escapar de la guerra. Perdió a algunos familiares y tuvo que viajar a Alemania.
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El central croata del Liverpool, Dejan Lovren, está viviendo un sueño como futbolista del Liverpool. Sin embargo, su vida no siempre fue tan fácil. El jugador, de padres croatas nacidos en la antigua Yugoslavia, cuenta, tal y como recoge Mirror, cómo fue su infancia, en la que tuvo que lidiar con una guerra que se cobró la vida de 104.732 personas (36.700 de ellas, civiles).
Cuando tenía tres años, su familia le metió en un coche y condujo durante 17 horas hasta Munich, en Alemania, con la intención de refugiarse con su abuelo: "Me gustaría poder explicar todo lo que pasó. Se oyen muchas historias, pero nadie conoce la cruda realidad. Todo cambió durante la noche. La guerra entre tres diferentes culturas. Sólo recuerdo cuando las sirenas se encendieron, estaba muy asustado pensando en las bombas. Recuerdo que mi madre me cogió y me llevó a la base. No sé cuánto tiempo estuvimos sentados allí. Creo que hasta que las sirenas se apagaron. Después, recuerdo a mi madre, a mi tío y a la mujer de mi tío. Nos llevaron en el coche y condujeron hasta Alemania. Ellos dejaron todo. La casa, la pequeña tienda de comida que tenían... Cogieron una mochila y dijeron: 'Vámonos a Alemania'. Yo fui fuerte. Hoy no podría imaginarme escapar con mis niños y estar realmente asustado por tu vida".
El central explicó también que algunos de sus parientes fueron masacrados durante el conflicto: "Fue en los pequeños pueblos donde ocurrieron las cosas más horrorosas. La gente fue brutalmente asesinada. El hermano de mi tío fue asesinado delante de otras personas con un cuchillo. Nunca hablo de mi tío porque es un poco duro hablar de ello, pero el perdió a su hermano, uno de los miembros de mi familia. El padre de uno de mis mejores amigos del instituto era soldado y recuerdo que él lloraba cada día porque su padre murió. Ese podría haber sido mi padre".
La familia de Lovren fue enviada a los Balcanes por las autoridades alemanas cuando la guerra acabó y Lovren no sabía hablar croata: "Tuve problemas en el colegio. Algo dentro de mí no le permitía a la gente reírse de mí y tuve peleas de colegio. Para ser sincero, la única cosa mía de la que no se reían era de mi fútbol. Creo que es por lo que la gente empezó a respetarme".
Por último, quiso dejar un mensaje para los miles de refugiados que hay hoy en día: "Yo pasé por ello y sé por lo que algunas familias están pasando. Dales una oportunidad. Podréis ver quién es buena gente y quién no".
