Euskadi mide hoy su potencial ante una peligrosa Túnez
Alejada la posibilidad de convertirse a corto plazo en combinado oficial, la Euskal Selekzioa disputa hoy en San Mamés su partido anual.
Alejada la posibilidad de convertirse a corto plazo en combinado oficial, la Euskal Selekzioa disputa hoy en San Mamés su partido anual. Lo hace contra Túnez, que dejó un buen sabor de boca ante Catalunya gracias al ritmo que tiene por su preparación para la Copa de África. La única incógnita es si pagará el esfuerzo realizado el miércoles ante Xavi y compañía.
El tándem Amorrortu-Etxarri tiene un equipo con talento por todas las esquinas. Illarramendi, Xabi Prieto, Yuri Berchiche, Iñigo Martínez y Oyarzabal rentabilizan el gran momento de la Real. El ejecutor Aduriz y Muniain pondrán pimienta al ataque, con San José e Iturraspe buscando su punto de forma. Toquero pisará Bilbao nueve días antes de ser por primera vez rival del Athletic con el Alavés, mientras Dani García y Capa representarán a un Eibar que se ha asentado en Primera como si nada. Es un gran momento para el fútbol vasco.
Cita de verdad. Hendrik Kasperczak, un centrocampista polaco de gran talento en los Mundiales de los setenta, tiene a Túnez muy afinada. Se comprobó en Girona, donde emergió desde la mediapunta la figura de Msakni. Apuesta por idas y venidas fulgurantes, lo que puede hacer más atractivo el choque. No se antoja una noche sin trabajo para Iraizoz y Oier Olazabal.
El ambiente, la verdad, no es el de las grandes ocasiones, pero la Federación Vasca confía en congregar a unos 30.000 aficionados. Buen dinero para sus arcas, aunque haya seguidores que entienden que el afán lucrativo está superando a la búsqueda de la oficialidad y han perdido la fiebre por el encuentro. Los futbolistas vascos, sin embargo, siguen respondiendo.