El Madrid, al Miniclásico en semis con el espíritu de Ramos

El Real Madrid lo volvió a hacer. De tanto insistir cada vez sorprende menos. El espíritu de Ramos, el del rescate cuando parece que no quedan ni fuerzas ni tiempo, poseyó ayer al Infantil en LaLiga Promises. Los pequeños tampoco se rinden y un partido que tenían perdido a minuto y medio, lo convirtieron en un triunfo épico, con Álex Sibacha y Ángel como héroes, ante un inconsolable Sevilla. En semifinales, les espera un Barça también con subidón de moral. Por el otro lado del cuadro, Atlético-Sporting.

Desde la grada se escucharon los murmullos. No uno ni dos, muchos lo presintieron. Ganaba el Sevilla 1-0, con gol de Barbate, quedaba poco más de un minuto y el Madrid tenía un córner a favor. Allá fueron sus torres. ¿Y si...? Efectivamente. Mario lanzó desde la esquina y Sibacha, el central, el número 4, se elevó sobre el resto y cabeceó a la red. La de Ramos. El Madrid empató y el duelo se fue a los penaltis. No cesó la fiesta y Ángel detuvo los dos del Sevilla para finiquitar el pase a las semifinales. El guion perfecto para los blancos antes del Miniclásico, donde le medirá un Barcelona al alza.

Los azulgrana reservaron su mejor actuación para los cuartos. Tras titubear en la fase de grupos y pasar terceros, barrieron al PSG. Al segundo minuto, Aleix limpió la escuadra con un zurdazo. Abierta la lata y con los franceses atacados de los nervios, el Barça de Adrià Capdevila se recreó. El 6 marcó el segundo y Xavi Planas, en plan ariete, hizo el tercero cuando no iban ni diez minutos: recibió de espaldas, utilizó su cuerpo para girarse con la pelota sin que el defensa la viera y fusiló. Tras el descanso, manejó el partido y cerró la goleada.

En el otro lado del cuadro se verán Sporting y Atlético. Los asturianos pasaron muchos apuros contra el Betis, a pesar de que el 0-2 parecía renta suficiente. Ferreres apareció: primero marcó un gol y se luego se inventó la jugada del segundo. Lo que en casi todos los partidos significaría asunto resuelto, el Betis se resignó a confirmarlo. Reina recortó de inmediato y los verdiblancos generaron ocasiones como para ganar. En las más claras, Ángel se topó con el larguero y Pece, tan vigilado de cerca por Madrid y Barça, con el poste.

Y tampoco fue holgado el triunfo atlético. Fue el partido de la tarde con menos oportunidades. La mejor la desbarató Javi Guerrero, portero del Villarreal, a un voleón de Jorge y, acto seguido, un cabezazo a bocajarro de Sergio. Con lo que no pudo fue con el mano a mano de Garnacho, que a falta de dos minutos apuntilló al Villarreal campeón del Nacional que no podrá hacer doblete.