Luisinho despide a Víctor
El Depor remonta el 1-0 de la ida con tantos de Arribas, un golazo del portugués y Babel. Piccini marcó luego el del Betis y Joselu falló un penaltiBetis-Villarreal: LaLiga en directo
El Deportivo sigue de dulce en Riazor. Después de derrotar en LaLiga a Real Sociedad y Osasuna, ayer le ganó la partida a Víctor en su regreso al estadio coruñés. Los de Garitano estarán así en los octavos de final de la Copa después de remontar el 1-0 de la ida en un partido de fases, pero en el que fueron superiores.
De arranque ambos equipos salieron con los onces esperados, aunque con pequeños matices. El de Víctor, plagado de titulares pero sin Rubén Castro (suplente) y Adán (descartado). En el de Garitano, con Guilherme y Babel de inicio, algún titular más de los esperado.
La eliminatoria tardó muy poco en cobrar vida, porque el Deportivo ya había igualado el 1-0 del Villamarín a los once minutos al rematar Arribas con la derecha una falta lateral con veneno sacada por Fayçal.
El gol animó el partido. Primero, con un Depor en busca de ventaja con una gran ocasión de Marlos que desbarató Dani Giménez. Luego fue el turno para el Betis, que en cuanto encontró a Ceballos apareció el peligro. Tuvieron el empate Piccini y Álex Alegría, pero respondió bien Rubén. Y no fue un espejismo, porque la balanza del partido cambió de color y se fue haciendo verdiblanca hasta el descanso, aunque sin daños para la portería deportivista.
Desperdiciado el momento, fue el turno del Depor, que salió del vestuario decido a rematar la faena. La remontada no pudo tener más morbo porque el gol decisivo llevó la firma de Luisinho. El portugués, con el que Víctor había tenido un sonado enfrentamiento que acabó con su salida del Depor, firmaba un golazo con olor y sabor a venganza.
Como la noche iba de goles simbólicos llegó el turno de Babel, para que Riazor cantase de nuevo el “Babel quédate”. El holandés acaba contrato el 31 de este mes y tiene pinta que los euros del Besitkas pesarán más, aunque por el cariño de Riazor no quedará.
El Betis estaba desnortado, casi fuera de la eliminatoria y con Rubén Castro calentando para entrar a la desesperada cuando Piccini logró acortar distancias en un complicado remate que abría de nuevo la eliminatoria de par en par. El acierto del defensa bético tuvo réplica, pero negativa, en su área al cometer penalti sobre Babel. Joselu, que no vio un balón en toda la noche, lo lanzó a las nubes para dar emoción al tramo final. Y la hubo, porque Rubén Castro rozó el gol que daría el pase al Betis, pero el otro Rubén, el del Depor, lo evitó.
