El Juvenil de Guti refuerza su liderato en Varsovia

Legia-Real Madrid en directo

El Juvenil A de Guti no sólo ha cogido velocidad de crucero, con el 6-1 al Atlético del pasado fin de semana como ejemplo, también aprende de sus errores. Si en la anterior jornada de la UEFA Youth League sacó un agónico 3-2 contra el Legia gracias a un autogol del polaco Bondarenko, para Polonia se llevaron los deberes hechos. Esta vez no dieron pie pensar de nuevo en una sorpresa y dominaron al Legia en el juego y en el luminoso.

Aunque le costó abrir el marcador, quizá demasiado enmarañado en el cambiante esquema del Legia, que utilizó tres centrales, el Juvenil blanco no encontró su ritmo habitual hasta mediada la primera mitad.

Dani Gómez en el 22’ el primero en tentar su suerte, pero lo que se encontró fue un guante de Majecki. Óscar, la mente pensante y ejecutora del equipo, empezó a dibujar líneas para superar el dibujo polaco. Y de esas acciones, nacieron los goles. Primero fue el exbético Toni Segura, que encontró un hueco para armar con calidad un toque de diestra para superar con una bonita rosca al meta polaco. Después, en medio de una siesta generalizada de la retaguardia del Legia, fue Alberto el que ofreció otra muestra del catálogo de calidad marca de La Fábrica con otra golpeo exquisito en el 0-2. Doble estacazo en cinco minutos y justo antes del descanso. En la práctica, el partido había terminado.

La segunda parte fue el vehículo para que el paraguayo Sergio Díaz siguiera montando contragolpes en su rol de futbolista total (también lo hace en el Castilla) y Óscar imaginase pases imposibles para desmontar al Legia. Dani Gómez, el tiburón de Alcorcón, tuvo un mano a mano que sacó Nawotka casi en línea de gol y Alberto tiró por la borda su posible doblete. Una vez que se había ido con velocidad de correcaminos, pensó demasiado cómo batir a Majecki y le insinuó la dirección del balón, encontrándose con una gran parada en vez de con el gol. Lo que pintaba a goleada se equilibró en el tramo final. El Legia se dio cuenta de que no iba a ningún sitió y metió presión al Madrid con su mejor baza, el balón parado. Un recurso ante el que Luca Zidane se mostró muy efectivo. O al menos así fue hasta el 94', en el que el hijo de Zizou volvió a protagonizar un 'highlight'... pero negativo. En un disparo lejano de Nawotka, Luca sacó de manera rara los puños, el balón voló al cielo y bote se envenenó de tal manera que sorprendió al portero hasta meterse en la portería. Indescriptible.

Pese a esa acción final, con este 1-2 y el pinchazo del Borussia en Dortmund, 0-1 contra el Sporting de Portugal, el Juvenil de Guti se reafirma como líder destacado del Grupo F con cuatro puntos sobre los portugueses. Tiene pie y medio en octavos de final.