La inseguridad impidió en 1991 que se jugara el Albania-España
La UEFA decidió suspender el choque apenas dos días antes de que se disputara por una revuelta social tras la dictadura de Enver Hoxha.
Un Albania-España es recordado por encima del resto. O, mejor dicho, uno que nunca llegó a disputarse. Ocurrió en diciembre de 1991. El día 16, la UEFA decidió suspender el choque apenas dos días antes de que se disputara según lo previsto en Tirana. El máximo organismo consideró que la seguridad de la expedición española no estaba garantizada por las revueltas sociales que se estaban produciendo en el país. El encuentro correspondía a la última jornada de la fase de clasificación de la Eurocopa 92 y, teniendo en cuenta que ambas selecciones estaban eliminadas, la UEFA no obligó a que se jugara. Así, el partido nunca se jugó.
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Aquel diciembre de 1991 supuso el fin de la dictadura que Albania sufrió a lo largo de 45 años. Primero Enver Hoxha, durante 39, y después Ramiz Alia, durante 6, sometieron al pueblo albanés y coartaron sus libertades en las más de cuatro décadas que duró el régimen. La revuelta contra el gobierno de coalición llegó sólo unas semanas antes de que España tuviera que visitar Tirana, lo que hizo imposible que el choque se disputara.
“Tengo mucho miedo. El hotel que nos correspondía ha sido saqueado. La gente allí tiene hambre y es capaz de cualquier cosa”, comentó Chus Pereda, seleccionador sub 21, tras los incidentes que apenas unos días antes habían terminad con 38 muertos. Martín Vázquez, entonces en el Torino, también fue claro: “Me parece la decisión más acertada. Cualquier cosa podía pasar. No hay que olvidar que nosotros llevábamos comida”. La suspensión definitiva del partido no fue la primera en la historia de la Selección. Por ejemplo en 1960 Franco impidió jugar en Moscú un URSS-España.
