"Aún no soy Cristiano o Messi pero quiero comer en su mesa"

El 11 de septiembre, un sondeo indicaba que el 50 % de los franceses desea que usted sea el líder del equipo de Francia. ¿Qué impresión le da?
Tengo la impresión que se busca un líder en el equipo de Francia sin que sea necesario de verdad. Siempre se busca este jugador. Yo, no necesito eso para subir mi nivel, dar lo mejor de mi y marcar o hacer marcar. Doy todo sobre el terreno y en respuesta necesito ser tranquilo, no tomarme la cabeza. En un vestuario, algunos tienen la capacidad de hablar, otros no. Algunos hablan mas en el terreno y otros menos. Cada uno su papel.

¿Qué es un líder de vestuario para usted ?
Es Evra. En el terreno, da todo y habla cuando es necesario. En el vestuario, anima todo el mundo, logra decir las cosas de la buena manera en el buen momento. Ahora, tenemos personalidades diferentes. Pero hay Lloris, por ejemplo, que no habla mucho porque es reservado pero, cuando lo hace, hay silencio en el vestuario. Todo el mundo puede hablar, Pogba se exprima de mas en mas.

¿Usted habla a veces con el árbitro?
Todo el tiempo con el Atletico (sonríe). A veces tengo razón y otras veces no. El pasado domingo, contra Valencia, el arbitro pito una falta que no era contra mi y le he dicho : “¡No, ahora no! ¡Te equivocas!”. No trato de influenciarle, justo decir lo que siento. Pero intento tener calma con los árbitros porque su trabajo no es fácil.

¿Y en el vestuario, usted habla?
No, que sea en la selección o en club. Hablo mas en el terreno, mismo si no pasa muchas veces tampoco. En el vestuario, intento ser tranquilo, relajado... Soy alguien a quien le gusta bromear, sonreír. No me siento capitán por el momento.

¿Un día puede pasar ?
A lo mejor pero no en este momento. Porque estoy con la idea de disfrutar en el terreno. No quiero tomarme la cabeza con el extra-deportivo, de tener que ir a hablar con uno o el otro, de ir a negociar las primas con el presidente de la federación.

Con la dimensión que usted tiene desde hace dos años, ¿siente miradas diferentes que sea por parte de sus rivales, los árbitros o sus compañeros?
Los árbitros ya no. Ahora, me llaman Griezmann cuando antes no sabia ni quien era. Necesitaban ver mi apellido en la camiseta. Es verdad que se siente en el terreno cuando un jugar tiene mas peso, que puede cambiar el partido. Las esperanzas son mas fuertes.
Se espera también que usted asume mas responsabilidades. Como a balón parado por ejemplo.
Si. En el Atletico es mas fácil porque soy el mejor goleador y eso da mucha confianza, facilita las cosas. En los penaltis, hay un orden. Soy el numero 1. En el equipo de Francia, no hay orden, habrá que ver si hay un penalti en los próximos encuentros (sonríe). En este momento, tengo poca suerte pero se que volverá.

¿Hay como un bloqueo con los penaltis?
No. A veces es mala suerte, otras veces es el guardameta que la detiene.

¿Usted tiene el sentimiento de ser considerado igual que otros cracks como Messi, Ronaldo o mismo Neuer?
Pienso que todavía tengo que demostrar por estar al mismo nivel, comenzando por ganar títulos. Ellos tienen muchos. Pero como ya lo he dicho, quiero sentarme en su mesa. Y pienso que poco a poco, lo logro. Espero quedarme en ese lugar lo mas lejos posible.

¿Esta declaración fue útil al final?
Puede ser porque hemos ganado todos nuestros partidos después. A lo mejor eso “picó” a todo el mundo. Pero una vez mas, fue algo espontáneo, no había nada detrás de aquello. No soy alguien que utiliza a los medios para pasar mensajes.

¿Hay momentos en los que es mas difícil guardar lo que usted siente?
Cuando uno atraviesa momentos de alegría, como la temporada pasada y nuestra clasificación frente al Bayern en Champions para la final, podía decir lo que sentaba. Pero siempre hay que estar atentos con sentimientos mas negativos. Simeone no me dice hablar mas en el vestuario. Tenemos a Gabi y Godin por eso. Mismo el lo hace muy bien. Me pide solo de ser importante en el terreno y llevar el equipo hacia la victoria.

Un poco como Deschamps que quiere verle como un líder ofensivo. ¿Qué es?
Es crear ocasiones, hacer marcar, marcar. Creo que es esto y estoy en el buen camino. Para los tiros libres, tenemos grandes jugadores como Payet. Pero si la falta es de mi lado, la tirare. Puede dejar un penalti o un tiro libre a un compañero, no me obsesiono con esto.

¿Cómo vivió la portada de L’Equipe durante la Eurocopa, “La inquietud Griezmann”?
Me molesto porque no era justo. Era después del partido contra Rumania, había pasado solo un encuentro. Me molesto también porque fue por parte de la prensa francesa, una prensa que debe ayudarnos, la que con un buen articulo te puede empujar hacia arriba, darte confianza. Yo esperaba confianza, no que se dudan de mi después del primer partido. Pero después he jugado bien, he respondido y es lo mas importante.

¿Y cuando salió la portada “Vota a Griezmann”?
Eso fue muy fuerte. Fue mucha alegría y mucho orgullo. Fue un gran gesto y me hizo mucho bien. Me da ganas de seguir trabajando, dar aun mas.

Cuando un jugador alcanza su nivel, ¿tiene derecho en reivindicar sus preferencias tácticas?
El seleccionador sabe muy bien en que posición me siento mejor. Solo hay que ver los partidos cuando estaba por la derecha o los otros justo detrás del delantero centro. Claro que me siento mejor en esta segunda posición pero no soy nadie para pedir lo que sea. De mi punto de vista, soy solo un jugador mas, no tengo que decir : “quiero jugar aquí”.

El seleccionador dejo caer que estaba dispuesto en construir el equipo a su alrededor.
Eso quiere decir que tiene mucha confianza en mi. Es verdad que ayuda cuando el técnico hace todo para que te sientes lo mejor posible. Lo veo con el Atletico, voy a la guerra por Simeone y con los Bleus es igual, iré a la guerra por Deschamps.

¿Habla mas con él?
Si. En la Eurocopa, me dio confianza con sus palabras y fue lo mismo la ultima vez en septiembre. Me dice lo que quiere, lo que espera. Que yo sea libre, que tome de vez en cuando la responsabilidad del juego ofensivo. Durante la Europa, en octavos de final contra Irlanda, cuando me puse de delantero centro en el descanso me he dicho : “Es para mi. Tengo que ganar ese partido”. Tuve una pequeña sonrisa y quería mostrar que pudiera hacer ganar al equipo jugando en esta posición. Y pudo lograrlo con la ayuda de Sagna y el pase de Giroud.

En una entrevista al Parisien, usted decía que en casa, la que manda es Erika, su pareja.
Si, la llamo la «jefa». Me ayuda mucho. Necesito estar bien en mi vida privada para serlo en el terreno. Ella de todo para que yo sea en plena forma y con la sonrisa.

¡Al final usted no es el jefe en ningún sitio! ¿Es una palabra que no le gusta?
(se ríe). No no, no es que no me gusta, es que soy así. No me toma la cabeza y quiero disfrutar de la vida. Del balón. Del terreno.