“No pienso en goleadas ni en gaitas, sólo en la victoria”
Garitano recibe al Barça sin temores. No va con su personalidad, ésa que le impulsa a repetir que cualquier partido (incluido éste) es de su Liga.Betis-Leganes
¿Ha sido una semana diferente?
—Hemos hecho todo como lo solemos hacer. Eso no cambia. Cambia la trascendencia del rival, el entorno. Te piden más entrevistas. Si tengo que hacer seis u ocho, pues se hacen y punto. Siempre tratamos de tener a todos contentos.
—Sea sincero. La victoria del Alavés en el Camp Nou no le hizo mucha gracia…
—No nos vino bien porque elimina ese factor psicológico de posible relajación con la que puede llegar un grande a Butarque. Si el Alavés no hubiera ganado ese partido, tendríamos más fácil dar la sorpresa. Pero que un equipo como el Alavés te muestre que les puede ganar también te dice que no hay imposibles.
—¿Nota nerviosos a los jugadores por jugar con el Barça?
—No creo que haya sobreexcitación. No quiero que sea nada diferente a la forma de preparar el partido cuando juguemos contra cualquier rival de Primera.
—Porque, como usted dice a sus íntimos, jugar contra el Barça es jugar un partido de la Liga del Leganés.
—¡Eso es! Somos 20 equipos en Primera y nosotros somos uno de ellos. Cada partido que juguemos es de nuestra Liga.
—¿Ha tenido que repetir este mensaje en el vestuario?
—Los jugadores ya saben mi opinión. No nos debe condicionar nada el rival. Como digo yo, jugamos sólo contra camisetas. En este caso será azulgrana. Otros días serán blancas, rojiblancas… pero no nos va a condicionar nada. Porque cuando hablas tanto de jugadores o de equipos te olvidas de lo tuyo y lo más importante es tener claro qué partido tienes que jugar y ejecutarlo más allá de quién esté delante.
—Dicho así, suena a que el Lega saldrá a atacar al Barça.
—El Barça te obliga a defender mucho. A casi todos los equipos. El 99% de los rivales que juegan contra el Barça pierden la posesión. Pero no vale sólo con defender. Debes de tener al menos la intención de hacer daño, aunque luego no lo consigas.
—Ser valientes, como ironiza el famoso cartel prepartido, ése que pide al Leganés no confiarse ante el Barça porque es un encuentro trampa.
—Es que es así. Lo más importante es creer que lo puedes lograr. Por delante del trabajo táctico está el convencer a los jugadores de que se puede ganar. Convencer al público. Tenemos que creer todos.
—Así que nada de miedos a una goleada culé.
—Es que no pienso ni en perder. No. Miedo nada. Respeto todo. La idea no es ni goleadas, ni gaitas. La idea es estar más cerca de ganar el partido que de perderlo.
—Para conseguirlo hay que parar a Messi. ¿Qué trampa le prepara?
—Todos los rivales han probado de todo y casi ninguno lo ha detenido. Hasta la fecha nosotros no hemos usado marcajes individuales. Lo podríamos usar… pero el problemas no es sólo Messi. Es el Barcelona. Todos.
—Por ejemplo…
—Por ejemplo, Iniesta. Hace mejores a todos los que juegan con él. Es algo fuera de lo normal. A mí esos futbolistas que, además de ser buenos individualmente, mejoran al equipo, siempre me encantaron.
—¿Qué hará si ve a uno de sus jugadores pedir una camiseta el sábado en el descanso?
—Si alguien está más preocupado por una camiseta que por poder jugar, mal asunto. Hasta la fecha ningún jugador ha pedido la camiseta en el descanso a ningún rival. Espero que ahora no cambie. No me fijaré en esas situaciones. Bastante tengo con lo que tengo.
—Su hijo Lander es del Barça. Se le ha colado el enemigo en casa.
—Esta semana no quiero ni hablar con él. Ya cuando ascendimos, allí, en pleno césped de Anduva, me dijo que lo pasaríamos mal contra el Barça. Ahora yo creo que ha cambiado, que no quiere que perdamos, pero no quiero ni saberlo. Es capaz de decirme cualquier burrada. Mejor ni hablar.