Iker Casillas dio el paso para la paz con Vicente del Bosque

Casillas llamó el pasado viernes a Del Bosque, dio el primer paso y lavó los trapos sucios en casa. “Míster, esto no puede ser. Tenemos que vernos y arreglarlo”. Del Bosque recogió el guante. Quedaron para el lunes (ayer) a primera hora en la Ciudad del Fútbol. Tras casi una hora de conversación, con enmiendas y puntualizaciones, el preparador físico de la Selección, Javier Miñano, hizo la foto que inmortalizó la paz con el iPhone de Casillas.

El portero insistió en que si retiró la palabra al cuerpo técnico justo el día del debut de España en la Eurocopa, el 13 de junio, fue porque se sintió dolido por pasar a la suplencia después de 167 partidos internacionales sin recibir la más mínima explicación.

Del Bosque reconoció que estuvo tentado de dárselas, pero que no conoce un sólo caso de un jugador que entienda las razones por las que se va al banquillo. El técnico, sin embargo, sí que asumió que quizás no debió hacer público el desencuentro, en sus declaraciones del jueves en la SER, pero aclaró que lo hizo sin mala intención y de forma espontánea. Casillas aceptó las disculpas.

Tras el encuentro llegó la foto de rigor, ambos en mangas de camisa y con una sonrisa sincera. La foto de Miñano, colgada en la cuenta de Twitter de Casillas con el mensaje “esta mañana, en la Ciudad del Fútbol. 25 años juntos y los que nos quedan! Un abrazo Míster! Suerte!” fue replicada por los internautas más de once mil veces y recibió casi veinte mil ‘me gusta’.

Después de firmar la paz con Casillas, en una mañana ajetreada, el seleccionador hasta el día 31, se reunió con el presidente de la Federación, Ángel Villar, que confirmó lo que ya avanzó este periódico la semana pasada. Del Bosque deja el cargo de seleccionador, se jubila de los banquillos y acepta seguir vinculado a la Federación, pero sin cargo remunerado. Villar le quiere de imagen institucional y le ofrece un puesto en la Junta directiva, bien en la RFEF, en la UEFA o en ambas.