Las razones del estallido de Lionel Messi contra la AFA
Leo se quejó en su cuenta de Instagram de los problemas organizativos que sufrió su selección durante la Copa América.
"Qué desastre son los dirigentes de AFA", publicó Lionel Messi ayer por la noche en Instagram mientras permanecía sentado en el avión que debía trasladar a su equipo de Houston a New Jersey para jugar la final de la Copa América. En el día de su cumpleaños número 29, el mejor jugador del mundo tuvo que esperar cuatro horas en el avión charter antes de que se pueda producir el despegue. Y se cansó de las desprolijidades en la organización de la AFA durante el torneo y se quejó en redes sociales.
Su compañero de cuarto, Sergio Agüero, también acompañó sus críticas. Y en el saludo por el cumpleaños del rosarino le pegó un palito a la AFA: "Feliz Cumple amigo. Siempre la pasamos en la concentración y hoy en un micro y sin cenar". El Kun se refería a que la albiceleste terminó arribando pasada la medianoche a Nueva Jersey por la demora del avión.
La crisis que vive la AFA (la Asociación del Fútbol Argentino), que está en banca rota, empañó la organización de la Selección Argentina. Y las esquirlas de la lucha de poder y el desgobierno que atraviesa el máximo organismo del fútbol argentino llegaron a los Estados Unidos y afectaron a la Selección Argentina. Los dirigentes que están al mando de la Albiceleste, el presidente Luis Segura, Chiqui Tapia y el Secretario de Selecciones, Víctor Blanco, tuvieron que viajar en varias oportunidades de regreso a Buenos Aires.
Para comenzar, los jugadores se quejaron del charter que los trasladó de Argentina a Estados Unidos. Cuentan en el seno de la selección que el avión no era el mejor acondicionado para trasladar a una selección en un vuelo de nueve horas. Ese mismo avión los regresará a la Argentina un día después del partido, otro de los motivos de enojo de los futbolistas, quienes pretendían regresar a su país después del partido.
La albiceleste por primera vez no pudo llevar sparrings a una competencia. Por motivos económicos, la AFA no pudo llevar al plantel sub 20 para que entrene con la mayor. Y debieron improvisar cada entrenamiento en cada ciudad con jugadores universitarios o equipos de menor jerarquía de la NASL, la segunda categoría del fútbol de Estados Unidos. Y se puso punto final al trabajo en conjunto entre las juveniles y el equipo mayor.
La AFA tampoco pudo costear el equipamiento del gimnasio y las salas de juego de la Mansión Hayes, donde la Selección hizo base en San José, California, desde el 29 de mayo al 7 de junio. Fueron los sponsors de la albiceleste quienes aportaron fondos para equipar el gimnasio del hotel.
También les ocurrió que tuvieron que esperar en un lobby la asignación de habitaciones en un hotel, ya que cuando arribaron no estaban en condiciones de ser ocupadas. El retraso de cuatro horas en el vuelo que debía trasladar a la albiceleste de Houston a New Jersey fue la gota que rebalsó el vaso. El entrenamiento que estaba previsto para esta mañana debió ser cancelado para la tarde. Y los jugadores sintieron que perdieron tiempo de preparación y descanso de cara a la final. Messi se cansó de las desprolijidades de la organización de la AFA. Y, a solo dos días de la final, produjo un sismo en la calle Viamonte, la sede del organismo en Buenos Aires.
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