Pizarra albiceleste

Argentina no sólo es uno de los países que domina el mundo del fútbol en lo que respecta a jugadores que militan en el extranjero, sino que también sucede con los técnicos. En esta Copa América, nada menos que seis entrenadores argentinos han estado a cargo de selecciones importantes. En los cuartos de final, de los ocho equipos, cinco tenían seleccionadores rioplatenses, y en las semifinales, tres de cuatro.

Quizás los de perfil más alto son José Néstor Pékerman y Gerardo Martino. El primero ha dirigido a las divisiones inferiores argentinas más ganadoras de los últimos tiempos y también a la albiceleste en el Mundial de Alemania. Ahora está a cargo de Colombia, selección a la que llevó a cuartos de final en Brasil y con la que ha logrado construir un grupo muy sólido.

El Tata ha tenido también una carrera dilatada, coronada, en primer lugar, por su experiencia en el Barcelona y, después, en la aventura que sigue viviendo con la albiceleste. Ya jugó una final de Copa América ante Chile y la perdió. Esta vez podría tener revancha.

Chile viene optando hace varios años por los seleccionadores argentinos. Después de Bielsa llegó Borghi, seguido por Sampaoli y este por Juan Antonio Pizzi. El nombramiento de Pizzi generó cierta sorpresa en los medios chilenos, y su inicio en la Copa América no fue ilusionante. Sin embargo, Chile ha mejorado mucho y la goleada ante México le ha librado un poco de la sombra de Sampaoli.

Ricardo Gareca, actual seleccionador de Perú, empezó a consagrarse como técnico en ese país, a cargo de Universitario. Luego se fue a Vélez, donde ganó casi todo lo que pudo y, tras una experiencia bastante parca en Colombia, se hizo cargo de la selección. Si bien en las eliminatorias la cosa no va bien, los desempeños en las dos copas América que ha dirigido ha sido muy bueno y parece estar en marcha un buen proyecto, si lo respeta la Federación Peruana de Fútbol.

El caso de Ramón Díaz en Paraguay es distinto: el ex técnico de River llegó con un perfil muy alto, pero su paso por la albirroja fue decepcionante. Tanto que ha sido despedido apenas se fue eliminada en la fase de grupos. Lo de Quinteros en Ecuador ha sido totalmente opuesto a lo que ha vivido Gareca en Perú: un inicio impresionante en eliminatorias y dos copas América para el olvido. Sin embargo, dada la importancia de clasificar a un Mundial, todas las miras de la afición ecuatoriana están puestas en las clasificatorias, en donde la tricolor casi ha asegurado su presencia en Rusia.