El 31 por ciento de los goles se han marcado a partir del 87'
Es la Eurocopa de los goles 'in extremis'. Ya se han marcado 12 desde el minuto 87, y siete tantos después del minuto 90. Además, siete han sido entre el 76 y el 90.
La Eurocopa de fútbol de Francia no parece apta para cardíacos: partidos ajustados, victorias por la mínima y sobre todo goles, muchos goles, en el último suspiro.
Desde que arrancó la competición el 10 de junio, y una vez disputado el Italia-Suecia (1-0), se han marcado un total de 39 goles; de ellos, siete tantos se han marcado después del minuto 90 y siete entre el 76 y el 90. Además, muchos de ellos cambiaron el destino del partido.
"Es un poco de casualidad. Los goles valen lo mismo al principio que la final, no le encuentro ninguna explicación", señaló el jueves el seleccionador español, Vicente del Bosque, cuyo equipo ganó en el debut 1-0 con un cabezazo de Gerard Piqué en el minuto 87.
El orden táctico de los equipos, la posibilidad de avanzar a octavos siendo tercero (con tres puntos podría valer) y la igualdad entre selecciones dejó una primera semana de competición muy ajustada. Sin embargo, los finales de los partidos están siendo la mayoría entre la agonía y el delirio.
Piqué, Dimitri Payet en dos ocasiones, Daniel Sturridge, Antoine Griezmann, Vasili Berezutski, Bastian Schweinsteiger, Graziano Pelle, Niall McGinn, Zoltan Stieber, Eder y Necid saben lo que es marcar entre el minuto 87 y el final del encuentro. De hecho, se anotaron más goles en ese tramo que en los 45 minutos de las primeras partes.
"Los resultados son cerrados y hay muchos goles al final de los partidos. Francia marcó al final en dos ocasiones, Irlanda del Norte también, al igual que nosotros", indicó Joachim Löw, entrenador de Alemania. "Muchos están participando por primera vez y es el torneo de su vida, por eso hacen lo que saben hacer: defienden y esperan el contragolpe".
Como si de una premonición fuera, el partido inaugural se decidió con un gol agónico en el minuto 87, el de Payet en el 2-1 de Francia a Rumania. Y los anfitriones ataron su pase a los octavos con un 2-0 ante Albania en el que los tantos de Griezmann y Payet llegaron, respectivamente, en el 90' y en el 96'.
Esos minutos finales marcaron una enorme diferencia para Francia. De verse con dos puntos en dos jornadas y jugarse todo en el tercer partido a estar con seis unidades y clasificada a octavos.
Inglaterra también festejó un importantísimo "late goal" con el tanto de Sturridge ante Gales en el 92'. Supuso el 2-1 definitivo después de empezar perdiendo 1-0, tres puntos vitales para los intereses de los "pross" en su segundo partido.
Y es que los de Roy Hodgson acariciaron la victoria en la primera jornada, pero se les escapó en el 92', justo cuando Berezutski marcó el 1-1 para Rusia.
Además de España, Francia e Inglaterra, otras dos selecciones potentes como Alemania e Italia tuvieron que sudar hasta prácticamente el pitido final antes de festejar la victoria en su debut.
Ambas ganaron 2-0, pero los goles de la tranquilidad, el de Schweinsteiger para los germanos ante Ucrania y el de Pelle para los italianos frente a Bélgica, no llegaron hasta los minutos 92 y 93.
Pero Italia va un paso más allá. Fiel a su estilo, las seleeción transalpina se impuso a Suecia con un gol de Eder en el minuto 88, un verdadero tributo a esta Eurocopa de los goles 'in extremis.
En una situación similar se vieron Irlanda del Norte y Hungría, que sorprendieron por 2-0 a Ucrania y Austria con los últimos tantos, obra de Niall McGinn y Zoltan Stieber, en los minutos 96 y 87.
Estos goles agónicos también responden a otra cuestión, la importancia de los suplentes, que entran con las piernas y la mente frescas en las segundas partes. Schweinsteiger, Griezmann, Sturridge o McGinn marcaron tras salir desde el banco.
"Las sustituciones jugarán un papel muy importante en el torneo, porque los partidos se ponen espesos y rápidos", analizó el técnico inglés, Hodgson, tras el gol de Sturridge. "Estábamos ansiosos por introducir más velocidad y ritmo a nuestro juego".