Lucas Alcaraz: "El Barça necesita al mejor Piqué en Granada"
Lucas Alcaraz fue el primer entrenador del Granada en ganarle al Barça en 42 años. Socio de toda la vida, granadinista de base, ha sido jugador, ayudante y primer entrenador.
Fue el primer entrenador del Granada en ganarle al Barça en 42 años. Socio de toda la vida, granadinista de base, ha sido jugador, ayudante y primer entrenador en Segunda B y Primera. Verá el partido con su hijo Lucas desde el asiento 44 de la fila 12 de la tribuna baja de Los Cármenes.
—Usted fue el primer entrenador del Granada en 42 años que ganó al Barça. 1-0. “Hicimos muchas cosas bien y tuvimos suerte”, dijo ese día en la sala de prensa. ¿Qué hicieron bien para ganarle al Barça que pueda copiarle José González?
—El escenario de aquel partido es distinto al que se jugará el domingo. Nosotros nos jugábamos el descenso y este Granada está salvado. Eso introduce matices nuevos. En nosotros había nervios, puestos de trabajo en juego.
—¿Cómo lo preparó?
—Sabíamos que nuestro partido era de un gol. Es decir, que podíamos hacer uno y que, como mucho, podríamos conceder otro para tener opciones de sumar. A partir de ahí, basamos nuestro juego en ayudas defensivas. Solidaridad y evitar los unos contra unos, especialmente los de Messi y Neymar. Eran las consignas generales.
—¿Liberado de presión el Granada se desconectará esta semana o se convertirá en un equipo más peligroso todavía?
—A mí me gustaría haber afrontado aquel partido de 2014 como el Granada este, sin la presión de que un mal resultado te lleva al hoyo. Si el Granada hubiera tenido una Liga un poco más cómoda este año, hubiera estado más arriba. Tiene jugadores con mucho descaro.
—Usted, socio del Granada desde crío, ha vivido el fútbol en el viejo y el nuevo Los Cármenes. ¿Cómo se lo va a tomar la afición el sábado?
—Como una fiesta. Va a reconocer el trabajo de los jugadores y de José porque se ha sufrido. La afición, además, ha madurado. Sabe que estar en Primera es difícil y permanecer, un éxito. Habrá ganas de fiesta y de agradecimiento por ejemplo a Quique Pina. Sin su proyecto no se entiende el fútbol en Granada en los últimos años.
—¿Pero además de fiesta puede haber también un ambiente hostil para el Barça?
—Si la gente ve opciones de que se puede ganar al Barça va a apretar, no lo dude. Además, en Granada hay muchos madridistas y si ven esa opción, pues seguro que empujarán. Lógico.
—Se habla mucho de salir a competir de tú a tú con el Barça pero la estadística demuestra que los equipos que le ganan son los que se meten atrás. ¿Está de acuerdo?
—Una cosa es lo que se dice en una rueda de prensa y otra lo que pasa en el campo. Queda muy bonito decir que vas a salir a jugar de tú a tu pero luego el Barça te aprieta. Lo que se intenta en esos partidos es que en vez del 80 por ciento de posesión, el Barça tenga el 65-70% y saber qué hacer cuando tú tienes el balón. Usar el balón para defenderte y atacar cuando le puedes hacer daño.
—Usted le ganó al Barça de Martino, que por el poco intervencionismo del argentino era básicamente la esencia de lo que había quedado de Guardiola y Tito Vilanova. ¿Este Barça es distinto como dicen?
—Aquel equipo elaboraba muchísimo la jugada. Casi en exceso. Creo que en una última época se estaba barroquizando. Ahora es un equipo más vertical. Eso sí, aquel equipo era capaz de encontrar una jugada donde no había espacio posible. A este le cuesta más. Pero vamos, que el Barça es siempre es el Barça.
—Vuelvo a aquel niño granadinista. ¿Qué recuerda del 2-0 del matagigantes al Barça con los dos goles de Porta? Dicen que Los Cármenes apretaba tanto como sus jugadores…
—Esa es la frase de Rexach, que cuando pasaba por la Plaza de Toros (en Granada está junto al terreno donde estaba el viejo Los Cármenes) decía: ¡qué suerte tienen los toreros, ellos lo tienen más fácil!. Era otro fútbol. Para empezar el Barça podía acabar las temporadas en mitad de tabla esa época. Y el Granada tenía equipos poderosos. Había otras condiciones, otros estadios, era distinto.
—¿Dónde están las opciones del Granada el domingo?
—Rochina es clave. Asiste muy bien. Si no hay desmarque, un pasador lo pierde todo. Pero ahora tiene a El Arabi y Peñaranda Si yo fuera el entrenador del Barça vigilaría a Rochina. Y a Fran Rico, que ya dio el pase a Brahimi el año que ganamos. A balón parado los dos son muy buenos y Jose trabaja bien ese aspecto del juego. El Granada se ha soltado tarde pero es muy buen equipo. Si el Barça no soluciona pronto el partido, puede pasarlo mal.
—Y El Arabi, 16 goles. Con los disgustos que le costó apostar tan fuerte por él en Granada...
—Los entrenadores estamos para llevarnos las broncas de la afición cuando creemos en un jugador. En esos momentos, lo fácil es quitarlo. El Arabi, se veía, es un gran jugador.
—O sea que el Barça necesitará estar atento atrás.
—Diría que el sábado necesitará la mejor versión de Piqué. Y de Mascherano.
—Aquel 1-0 no fue la única vez que usted le ganó al Barça…
—Sí, en el Racing le ganamos 3-0 al Barça de Rijkaard, un caballero por cierto. Teníamos jugadores rápidos y de calidad como Benayoun, Javi Guerrero, Regueiro. Se podría asemejar a este Granada. Luego el Barça estuvo 19 partidos sin perder y fue subcampeón. Recuerdo la vuelta en el Camp Nou. Luis Enrique se despedía del Camp Nou como futbolista en activo. Le dieron una gran ovación…