Detienen al presidente ruso del Uniao de Leiria por blanqueo
El presidente del Uniao de Leiria portugués, Tolstikov, fue detenido por la policía lusa en el marco de una operación lanzada contra el blanqueo de capitales y asociación criminal.
El presidente del Uniao de Leiria portugués, el empresario ruso Alexander Tolstikov, fue detenido por la policía lusa en el marco de una operación lanzada contra el blanqueo de capitales y asociación criminal.
El arresto de Tolstikov fue confirmado por medios oficiales portugueses, que informaron también de la detención de uno de los dirigentes del equipo -que milita en la tercera división lusa- y un asesor.
La investigación, a cargo de la Fiscalía lusa, analiza el uso del Uniao de Leiria en una trama dirigida a blanquear dinero por parte de capital ruso a través de diferentes traspasos y transferencias.
Los agentes, de hecho, realizaron registros este martes en la sede del Benfica, el Sporting de Lisboa y el Sporting de Braga para estudiar documentación referente a negocios realizados con el Leiria desde la llegada de Tolstikov al club, en verano de 2015.
Según estas mismas fuentes, además de los tres detenidos fueron constituidos como "sospechosos oficiales" otras tres personas, a la espera de tomar declaración a todos ellos.
La llamada "Operación Matrioskas", que ya permitió "aprehender material con relevante interés probatorio", investiga "la presumible práctica de crímenes de blanqueo, fraude fiscal, falsificación de documentos y asociación criminal por parte de ciudadanos nacionales y extranjeros vinculados a la actividad deportiva", según las autoridades.
El Uniao de Leiria anunció la creación de una Sociedad Anónima Deportiva (SAD) en verano de 2015, con el 40 % en sus manos y el 60 % en las de la empresa DS Investment, perteneciente al grupo ruso D-Sports.
Desde entonces su presidente es el también ruso Alexander Tolstikov, quien prometió en su llegada trabajar para conseguir el ascenso.
El Leiria dejó la Primera División en 2012 después de una temporada marcada por los problemas financieros en la que incluso llegó a quedarse con apenas ocho jugadores profesionales en plantilla, lo que le obligó a recurrir a varios futbolistas júnior para completar la campaña.
Posteriormente no logró cumplir los requisitos para inscribir al equipo en Segunda, lo que motivó su descenso a la tercera categoría del fútbol portugués.